La Navidad despierta el sentimiento de comunidad a lo largo del mundo. Las tradiciones y la cultura se mezclan para producir eventos únicos que, una vez todos los años, hacen cambian la cotidianeidad.
A continuación se detallan, una muestra de los festejos icónicos de la navidad en diferentes lugares:
Wonderland en Londres
Durante la temporada navideña, Hyde Park, en Londres se convierte en Winter Wonderland, ya que los lugareños celebran las fiestas con uno de los festivales más grandes del mundo.
Winter Wonderland tiene elementos tradicionales de festivales navideños: una pista de hielo, visitas de Papá Noel, la comida festiva más cuantiosa y diversa que es posible probar y compras navideñas. Además, también tiene dos circos al estilo del Cirque du Soleil con temas de Navidad organizado por Zippos Circus, así como dos enormes montañas rusas, una rueda de observación de 600 metros de altura y una feria de atracciones para niños.
La noche de los rábanos en México
En Oaxaca se celebra un festival en el que los comerciantes y artesanos venden rábanos que han sido intrincadamente tallados para representar pesebres, vida silvestre y arquitectura local, entre otras curiosidades. Las tallas de rábano se venden como centros de mesa navideños. Y se premia al creador del mejor diseño.
Los 12 bares en Irlanda
Con la llegada del clima frío y navideño, toda la ciudad de Dublín estalla en un tumulto de color festivo, villancicos y alegría. Las calles cobran vida con el entretenimiento y tampoco faltan las pantomimas y los conciertos de temporada. Los niños pueden visitar los talleres de duendes y la gruta de Papá Noel, mientras que los adultos participan en entretenimiento en vivo y bebidas festivas.
La principal atracción de la temporada, sin embargo, es la peregrinación anual de amantes de las bebidas fuertes que se llama 12 bares de Navidad. En lugar de ir a 12 casas diferentes o una docena de iglesias en la ciudad, la gente va a 12 pubs en una noche.
Tío de Nadal en Cataluña
En esa región española se celebra la tradición del Tío de Nadal (término en catalán que se traduce como tronco de Navidad). A un tronco ahuecado se le talla una cara, se le agregan ramas como piernas y se lo adorna con un pequeño sombrero rojo. A partir del 8 de diciembre, las familias ‘alimentan’ al nadal todas las noches, llenándolo de regalos y dulces.
También lo cubren con una manta, para mantenerlo caliente en pleno invierno. En Nochebuena, el leño se coloca en la chimenea (apagada) y los miembros de la familia se turnan para golpearlo con un palo, ordenándole que suelte los regalos y los dulces, mientras juntos cantan canciones navideñas.
Visitar a Santa Claus en Finlandia
Santa Claus Village es un parque de atracciones en Rovaniemi, en la región de Laponia en Finlandia. Fue inaugurado en 1985. La primera casa original de Santa Claus fue Korvatunturi. En 1985, Rovaniemi fue declarada ciudad natal oficial de Papá Noel. El Círculo Polar Ártico atraviesa ostensiblemente el Pueblo de Papá Noel.
Una línea blanca que denota el Círculo Polar Ártico (en su posición en 1865) está pintada a lo largo del parque. La Oficina de Papá Noel está ubicada dentro del edificio principal de la Villa, para que los visitantes tomen fotografías y conversen con él.
La Befana en Italia
La versión italiana de Papá Noel es una vieja bruja llamada La Befana. Según cuenta la leyenda, los Reyes Magos se detuvieron en su casa para pedir instrucciones de camino a visitar al niño Jesús y la invitaron a que los acompañara en su viaje, pero ella dijo que tenía demasiadas tareas domésticas que hacer.
Cuando el trío partió, ella cambió de opinión y trató de encontrarlos, pero no pudo por mucho que lo intentó. Dicen que, desde entonces, vuela la noche del 5 de enero (la víspera del encuentro de los Reyes Magos con el niño Jesús). Al igual que Papá Noel, La Befana entrega juguetes a los niños. En lugar de leche y galletas, los italianos le dejan un plato de salchicha y brócoli, más una copa de vino.
Pollo frito yanqui en Japón
Así como en la Ecuador se asocian la navidad con el pavo , en Japón la mesa navideña incluye el famoso pollo frito de Kentucky Fried Chicken. Se estima que 3,5 millones de familias niponas lo comen todos los años en Nochebuena.
Es el resultado exitoso, y todavía vigente, de una campaña de marketing que la compañía llevó a cabo en los ’70, llamada Kurisumasu ni wa Kentakkii (Kentucky para Navidad). Los cristianos constituyen un porcentaje muy pequeño de la población de la isla, por lo que esa propuesta compensó la falta de tradiciones navideñas populares. Los locales de la cadena toman reservas con meses de antelación.
Krampus en Alemania, Austria y Hungría
En la tradición alpina, Krampus es una criatura diabólica, hermano del amigable Santa Claus. Según la leyenda, durante la Navidad, esta criatura con cadena y vara castiga a los niños que se portan mal, en contraste con su otro yo, quien premia a los niños buenos con regalos.
Muchos adultos se disfrazan de Krampus a principios de diciembre y deambulan por las calles para asustar a los niños.
El Día de las Velitas en Colombia
El Día de las Velitas marca el inicio de la temporada navideña en Colombia. En honor a la Virgen María y a la Inmaculada Concepción, la gente coloca velas y farolillos de papel en las ventanas, balcones y jardines.
La tradiciónes navideñas de las velas se ha hecho tan popular que ahora muchos pueblos y ciudades de todo el país se iluminan con velas y farolillos elaboradísimos. Algunos de los mejores pueden verse en Quimbaya, donde los vecinos compiten por ver quien crea el adorno más impresionante.
Animales y zapatos en Brasil
En Brasil se cree que durante las fechas de las Navidades los animales adquieren la capacidad de hablar, así que los niños se pasan el día intentando entablar conversaciones con sus mascotas.
Además, es curioso que Papá Noel les deja los regalos dentro de los zapatos y no debajo del árbol.
Un poema por cada regalo en Letonia
El país europeo tiene una de las tradiciones más bonitas que podría haber en Navidad. Después de la gran cena de Nochebuena, todos los miembros de la familia buscan su regalo debajo del árbol.
Sin embargo, abrirlo no es tan fácil: para ello hay que recitar un poema por cada regalo que tenga. Una costumbre peculiar que no solo embellece la noche, sino que agudiza el ingenio y enriquece el intelecto.
Las escobas y la navidad en Noruega
Quizás una de las tradiciones navideñas menos ortodoxas la encontramos en Noruega, donde la gente se dedica a esconder las escobas. Esta tradición tiene su origen hace cientos de siglos, cuando se creía que las brujas y los malos espíritus aparecían en Nochebuena para buscar escobas con las que volar. A día de hoy, muchos aún esconden las escobas en el lugar más seguro de la casa, para evitar que se las roben.
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