Cinco miembros de las fuerzas de seguridad fallecen en un tiroteo en Cachemira, India

El líder del Partido del Congreso (INC), Rahul Gandhi, instó al Gobierno de Modi a asumir responsabilidad total por los incidentes de seguridad recurrentes en la región.

Este martes, fuentes oficiales informaron que cuatro soldados indios y un policía perdieron la vida, y otro miembro de las fuerzas de seguridad resultó herido en un tiroteo con insurgentes en la región disputada de Cachemira, India.

El pasado 8 de julio, en el distrito de Kathua, cinco soldados fallecieron en un ataque insurgente, marcando una serie de acontecimientos que resaltan la expansión de las actividades insurgentes más allá de las fronteras con Pakistán.

El trágico suceso tuvo lugar alrededor de las 21h00 hora local (15:30 GMT) cuando se estableció contacto con los terroristas, desencadenando un fuerte tiroteo, según comunicado del Ejército en la red social X. Varias unidades militares resultaron heridas en el enfrentamiento.

Según una fuente policial, que solicitó el anonimato, el incidente ocurrió cerca de la ciudad de Doda luego de recibir información sobre la presencia de insurgentes en la zona. Cinco soldados y un policía resultaron heridos por disparos tras un intercambio de fuego con los terroristas.

Trasladados al hospital, lamentablemente, cuatro soldados sucumbieron a sus heridas durante la noche, sumándose la pérdida de otro policía. Este desafortunado episodio constituye el segundo tiroteo significativo en la región de Jammu en una semana, antes considerada relativamente pacífica, situada en la Cachemira bajo control indio.

Tras el reciente ataque, las autoridades policiales estimaron la presencia de unos cincuenta insurgentes en la zona, instando al Ejército a utilizar todas sus capacidades antiterroristas para contrarrestar la creciente amenaza en Jammu.

En respuesta a los hechos, la oposición al gobierno nacionalista hindú del Bharatiya Janata Party (BJP) expresó su profunda preocupación, destacando la necesidad de revisar las políticas vigentes en la región.

Este trágico enfrentamiento subraya la complejidad de la disputa de soberanía entre Pakistán e India en Cachemira, un conflicto arraigado desde la partición del subcontinente en 1947, que ha derivado en numerosas confrontaciones armadas a lo largo de los años.

El líder del Partido del Congreso (INC), Rahul Gandhi, instó al Gobierno de Modi a asumir responsabilidad total por los incidentes de seguridad recurrentes en la región, señalando la necesidad de abordar las preocupaciones en Jammu y Cachemira.