No hay fondos suficientes para enfrentar el total de sus obligaciones y todavía no destrabó un adelanto en los desembolsos. Este miércoles hay que girar alrededor de US$920 millones y el jueves unos US$1775 millones. En el Palacio de Hacienda evalúan postergar los compromisos hasta fin de mes.
En pleno cierre de listas, Sergio Massa demora su viaje a Washington para renegociar el acuerdo con el FMI, cuyas metas para el segundo trimestre fueron incumplidas o se encaminan a hacerlo. Aunque las conversaciones virtuales siguen, por ahora no hay precisiones sobre la firma del entendimiento. Mientras tanto, el calendario de vencimientos sigue en pie.
De acuerdo con ese cronograma, la Argentina enfrenta dos pagos por algo más de US$2695 millones en los próximos días. Este miércoles debe pagar al FMI alrededor de US$920 millones y el jueves debería girar a la sede de ese organismo en Estados Unidos unos US$1775 millones.
La intención inicial del Gobierno era lograr que el FMI adelantara a este mes todos los desembolsos previstos para 2023, teniendo en cuenta las dificultades para acumular reservas debido a la sequía.
Al respecto, los analistas de la consultora LCG consideraron: “No creemos que el FMI apruebe adelantar fondos de 2024 al 2023, pero tampoco esperamos que empuje al país al default. Definitivamente, sin el desembolso del FMI sería imposible atravesar los próximos meses, más atendiendo a las necesidades de pagar intereses por la deuda en dólares del sector público”.
En todo caso, la expectativa de LCG es que el Gobierno consiga que la entidad conducida por Kristalina Georgieva refinancie los vencimientos hasta septiembre, por alrededor de US$7000 millones, y “otorgue en concepto de dificultades por la sequía un adicional que serviría para cubrir las necesidades del próximo trimestre”.
Qué puede hacer la Argentina para “patear” el vencimiento con el FMI
Si bien las reuniones virtuales entre el equipo económico y el staff técnico del FMI continuaron durante este fin de semana largo y seguirán en los próximos días, la conversación todavía no está lo suficientemente avanzada como para que el ministro de Economía viaje a Washington a estampar su firma.
Por eso, habrá que recurrir a un plan “B”. Según pudo averiguar TN, en el Palacio de Hacienda ahora apuntan a realizar el pago a fin de mes. Según Invertir en Bolsa, una vez pasada la fecha de vencimiento, el Gobierno dispone de 30 días para regularizar su situación.
Con reservas netas negativas que los economistas ya estiman en alrededor de US$1700 millones, el Gobierno tiene pocas alternativas para cancelar los pagos al FMI. Una posibilidad que evaluaban en el equipo económico era hacer un pago parcial que demuestre “buena voluntad”.
Cálculos privados indican que entre las reservas brutas del Banco Central (BCRA) todavía queda el equivalente a US$1700 millones en Derechos Especiales de Giro (DEG, la moneda del FMI) que sobraron del último desembolso que hizo el organismo. Si bien esa cifra no alcanza para cancelar todas las obligaciones de esta semana, se podría usar para hacer el pago parcial y continuar con la negociación, a la espera de una resolución favorable por parte del organismo.