Cómo es la experiencia de nadar con lobos marinos

Las propuestas en Puerto Madryn y Punta Villarino, en la Patagonia. Recomendaciones básicas y precios.

¿Quién se anima a meterse primero?”, pregunta el guía desde el agua. Todos los que estamos en la embarcación nos miramos de reojo, con dudas, hasta que alguien se decide y salta.

La baja temperatura del mar de Puerto Madryn, Chubut, no se siente con el traje de neopreno seco; ni una gota de agua entra en contacto con el cuerpo. Eso sí, todos necesitamos unos minutos para acostumbrarnos al traje, que, como no se hunde, hace más lentos los movimientos y, al menos al principio, parece entorpecer cualquier intento de desplazamiento.

A pocos metros de donde esto sucede, sobre unas rocas en la costa, está la colonia de lobos marinos de la Reserva Lobería de Punta Loma. Algunos lobos marinos permanecen indiferentes a nuestra presencia, sobre todo los ejemplares adultos, mientras que otros se tiran al agua y vienen rápidamente a nuestro encuentro.

Las crías, curiosas, se acercan con ganas de interactuar: nadan a nuestro alrededor como si fuera un juego y hasta es posible tocarlas. Sin timidez, un lobito se “trepa” a uno de los visitantes y posa para las cámaras de fotos que, lógicamente, son a prueba de agua.

Nadar con lobos marinos es una experiencia increíble. Son inofensivos y las crías, como si fueran mascotas de toda la vida, parecen disfrutar de la actividad y el contacto tanto como nosotros.

Propuestas patagónicas

Puerto Madryn, en Chubut, es el destino más conocido para este tipo de propuesta. Los prestadores locales ofrecen dos opciones para hacer con lobos marinos: snorkel o buceo. La logística es la misma en los dos casos, y en un mismo grupo puede haber gente que lo hace de una manera o de otra.

Snorkel o buceo con lobos marinos en Puerto Madryn. Foto Abramar

A la hora acordada, el punto de encuentro es el local del prestador elegido, donde se entrega todo el equipo necesario para realizar la actividad y se brinda una breve charla introductoria sobre su uso.

Luego, ya en la playa de la ciudad, llega el momento de abordar la lancha rumbo al Área Protegida Punta Loma, ubicada a 17 km de las costas de Madryn (alrededor de 25 minutos de navegación).

El descenso al agua se hace a pocos metros de la costa donde se ubica la colonia de lobos marinos. En la zona se permanece unos 45 minutos flotando y disfrutando de la interacción con los lobos, para luego retornar al punto de partida.

El otro sitio en el que se puede nadar con estos animale es la reserva de lobos de Punta Villarino, en el extremo de la península donde se encuentra San Antonio Este, Río Negro -frente a Las Grutas-, aunque en este caso hay un solo prestador que realiza la actividad: Rupestre Patagonia.

Cuenta con un local en el puerto de San Antonio Este, donde se provee el equipo (solo snorkel; no ofrece buceo) y también, tal como sucede en Madryn, se brinda una charla con recomendaciones.

Luego de esa introducción se embarca y se navega 10 minutos hacia la boca de la bahía San Antonio, donde está el apostadero de lobos marinos de un pelo.

La actividad se hace sobre un banco de arena. Y con la amplitud de marea que tiene esta bahía -un promedio de 9 metros-, cuando ese banco queda cubierto por el agua debido a la pleamar, los lobos permanecen nadando en el lugar hasta que la marea baja.

Una aclaración importante: en ningún momento de la excursión se presiona a los animales para que hagan algo que vaya más allá de su comportamiento natural. Los visitantes se quedan nadando en una determinada zona, y son los lobos los que se acercan a interactuar.

Claves de la actividad

Algunas pautas básicas para planificar y animarse:

• Traje seco o húmedo. Todos reciben un traje de neopreno, que puede ser húmedo o seco. El húmedo es el más conocido y permite el contacto del agua con el cuerpo. Con el seco, al retirar el traje -como su nombre lo indica-, el cuerpo está totalmente seco. Este traje se puede colocar por encima de la ropa;en este caso, se aconseja usar una muda fina y cómoda.

• Accesorios. El equipo se completa con una luneta (máscara para los ojos) y aletas (patas de rana).

• Comportamiento. Los prestadores piden no realizar movimientos bruscos en el agua ni gritar, para no perturbar a los animales.

• Edades y límites. En Puerto Madryn, la actividad se aconseja para niños a partir de los 5 o 6 años y adultos hasta los 60 años.

En Rupestre Patagonia todo el que quiera es bienvenido, pero el lugar no cuenta con trajes secos para niños, por eso recomiendan que si la actividad se hace con chicos, que sea en verano.

• ¿Hay que saber nadar? A diferencia de lo que se pueda creer, saber nadar no es un requisito obligatorio, ya que los trajes de neopreno garantizan la flotabilidad.

• Épocas. En Punta Villarino se realiza una salida por día, para un máximo de diez personas, entre julio y abril. En Puerto Madryn, en tanto, hay varios prestadores, con salidas diarias todo el año, y hasta dos por día en temporada alta.

• Duración. En ambos casos, las excursiones duran tres horas en total.

• Cuánto cuesta. En Puerto Madryn el snorkel con lobos cuesta $ 39.000 por persona; el buceo, $ 54.000. En Punta Villarino, se estima que el snorkel rondará los $ 25.000 por persona al abrir la temporada.w

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