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En su intervención durante la COP30 en Brasil, el presidente de Colombia, Gustavo Petro, pronunció un discurso que resonó en todo el auditorio y rápidamente trascendió fronteras. Con un tono directo y desafiante, criticó la ausencia de Estados Unidos en la cumbre y la negativa del expresidente Donald Trump a asistir, calificando ese gesto como una negación de la ciencia que pone a la humanidad al borde del abismo. “Está completamente equivocado: no es taladrar, taladrar, taladrar; es descarbonizar”, enfatizó, en referencia a la insistencia de algunos líderes en mantener la dependencia de los combustibles fósiles.
Petro amplió su mensaje hacia Europa, advirtiendo que incrementar la inversión en armamento es un error histórico. “El enemigo no es Rusia; el enemigo es la crisis climática que amenaza el futuro de sus hijos y nietos”, señaló con firmeza, recordando que las verdaderas batallas no se libran en los campos de guerra, sino en los esfuerzos por preservar el planeta.
El mandatario colombiano también condenó las tensiones geopolíticas que desvían la atención de los problemas esenciales. “Las amenazas de invasión a Gaza, a Venezuela, a Cuba y a Colombia nos hacen perder el tiempo”, afirmó, denunciando que el enfoque militar y la confrontación perpetua impiden avanzar en la lucha contra el cambio climático.
En un momento de su intervención, respondió a las acusaciones del expresidente Donald Trump, quien lo ha señalado públicamente como “líder del narcotráfico”. “He arriesgado mi vida combatiendo ese flagelo y liderando incautaciones históricas”, aseguró, reivindicando su trayectoria y su compromiso con la justicia.
Durante su intervención en la COP 30 de Belém do Pará, el Presidente @PetroGustavo planteó que, para enfrentar la crisis climática y proteger la vida humana ante el colapso climático que avanza sin freno, el objetivo común debe ser la construcción de una economía descarbonizada,… pic.twitter.com/9M1j5EbI7m
— Presidencia Colombia 🇨🇴 (@infopresidencia) November 6, 2025
Concluyó con un llamado urgente a la conciencia global. “No se trata de fronteras ni de ideologías. El enemigo común no tiene bandera: es la crisis climática. Si no actuamos juntos, el futuro será una víctima más de nuestra indiferencia”, sentenció.
El mensaje de Petro, cargado de advertencias y verdades incómodas, se alzó como una de las intervenciones más contundentes de la cumbre. Su voz, más allá de la política, buscó despertar a un mundo que sigue mirando hacia otro lado mientras el planeta se consume.
carloscastaneda@prensamercosur.org
