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El presidente Gustavo Petro lanzó duras críticas contra su exministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, a quien acusó de haber ocultado información relevante sobre la deuda externa y de actuar en contra del programa de cambio que su gobierno promueve. La declaración, hecha a través de un mensaje en la red social X (antes Twitter), reaviva las tensiones entre el mandatario y una de las figuras más destacadas de su primer gabinete.
Petro recordó que Ocampo, un economista con una trayectoria reconocida tanto en Colombia como en el ámbito internacional, fue su primera carta para dirigir la política económica del país. Exministro de Agricultura, académico de prestigio y actualmente profesor en la Universidad de Columbia, Ocampo fue recibido en su momento como un signo de apertura hacia sectores técnicos y moderados. Sin embargo, las diferencias de criterio con el presidente se hicieron evidentes desde los primeros meses de gobierno.
En su publicación, el jefe de Estado aseguró que el entonces ministro no le presentó con claridad el panorama de la deuda externa. “Debió mi ministro de Hacienda, José Antonio Ocampo, presentarme el problema, pero lo ocultó. Él en realidad estaba comprometido con un sector social y político que quería el saboteo del programa del cambio”, escribió Petro. Según el mandatario, su decisión de incluirlo en el gabinete respondió a “una ingenuidad motivada por mi sesgo académico”.
El presidente agregó que su confianza en la pluralidad ideológica y en la posibilidad de construir un pacto social amplio lo llevó a incorporar figuras de distintas corrientes políticas. “Creía que era posible la amplitud pluri-ideológica y el pacto social”, afirmó. Sin embargo, lamentó que ese ideal se viera frustrado por intereses que, a su juicio, buscaron obstaculizar las transformaciones propuestas desde la Casa de Nariño.
Ocampo, que en su momento defendió una política económica de equilibrio fiscal y moderación frente a los mercados, no ha respondido públicamente a las nuevas declaraciones del presidente. Su salida del Ministerio de Hacienda marcó el fin de una etapa en la que el gobierno intentó mantener un tono conciliador con el sector financiero y los gremios económicos.
Las palabras de Petro reflejan una tensión constante entre su visión de un cambio estructural impulsado por la movilización social y la prudencia técnica que encarnaban algunos miembros de su primer equipo ministerial. El mandatario insistió en que la verdadera transformación solo será posible “si hay una enorme movilización popular”, reafirmando su convicción de que el poder del pueblo debe ser el motor del cambio.
carloscastaneda@prensamercosur.org
