Una transformación que dio vida a la ciudad
El Boulevard del Río, ubicado en el corazón de Santiago de Cali, es mucho más que un corredor peatonal. Es el resultado de un ambicioso proyecto de renovación urbana que convirtió una zona vehicular y deteriorada en un espacio vibrante y acogedor que ahora late al ritmo del arte, la cultura y la vida social de la ciudad.
Este corredor, que bordea el río Cali a lo largo de la Avenida Colombia, fue inaugurado en 2013 como parte del plan de peatonalización del centro histórico de la ciudad. El proyecto implicó la recuperación del espacio público, la valorización del entorno natural del río y la creación de un ambiente seguro para el disfrute tanto de locales como de turistas. Con más de un kilómetro de extensión, el boulevard alberga zonas verdes, plazoletas, jardines, puentes peatonales, mobiliario moderno, murales, esculturas, cafés al aire libre y expresiones artísticas que lo convierten en una galería urbana viva.
ARTE CALLEJERO, HISTORIA Y MODERNIDAD
Caminar por el Boulevard del Río es emprender un viaje sensorial. A un lado, el sonido constante del río que serpentea con calma entre los muros de contención. Al otro, fachadas coloniales y modernas conviven con intervenciones de arte urbano: grafitis, murales de gran formato y esculturas que narran historias propias de Cali, desde leyendas urbanas hasta homenajes a personajes ilustres.
Destacan piezas como la escultura de El Gato del Río de Hernando Tejada, ubicada muy cerca del boulevard, que se ha convertido en un símbolo turístico y artístico de la ciudad. Además, se pueden apreciar réplicas coloniales, fuentes de agua, y espacios diseñados para el descanso, la lectura o la contemplación del paisaje urbano.
En este corredor también se halla el Teatro Jorge Isaac, joya arquitectónica del siglo XX, así como varios puntos de interés histórico como la Iglesia La Merced o el Puente Ortiz, construcciones que conectan la ciudad contemporánea con su herencia fundacional.
CULTURA VIVA Y EXPRESIÓN CIUDADANA
Uno de los aspectos más llamativos del Boulevard del Río es su carácter participativo. Desde su apertura, este espacio se ha convertido en un escenario de libre expresión artística y cultural. Aquí es común ver espectáculos callejeros, conciertos espontáneos, performances teatrales, danzas urbanas, ferias de emprendimiento, exposiciones fotográficas y eventos de literatura.
Este entorno ha generado una revitalización del comercio local. Cafeterías artesanales, restaurantes fusión, puestos de jugos naturales y tiendas de diseño emergente han florecido a lo largo del corredor. Estos espacios no solo ofrecen productos, sino que aportan a la identidad cultural de una Cali renovada que promueve el encuentro entre generaciones y el disfrute de lo cotidiano.
Además, el boulevard se ha vuelto un punto de encuentro clave en las noches caleñas. Grupos de jóvenes, familias, parejas y turistas convergen en este paseo urbano para caminar, escuchar música en vivo, conversar al aire libre o simplemente disfrutar del ambiente relajado e inclusivo.
TURISMO, SOSTENIBILIDAD Y CONCIENCIA URBANA.
El impacto del Boulevard del Río también se ha sentido en el ámbito turístico. Ha sido promocionado como una parada obligada en recorridos guiados por la ciudad, junto con otros puntos emblemáticos como el Cerro de las Tres Cruces, el Cristo Rey y el barrio San Antonio. Para los visitantes, el boulevard representa una forma de conectarse con la cotidianidad de Cali y entender la transformación de una ciudad resiliente.
Este proyecto urbano ha promovido también una nueva conciencia sobre el espacio público. Cali, por muchos años marcada por el caos vehicular y la falta de zonas verdes, ha dado un paso hacia un modelo más sostenible e inclusivo. La peatonalización de sectores clave como este invita a otras ciudades colombianas a repensar sus entornos urbanos desde una mirada que priorice la calidad de vida, el arte y la integración ciudadana.
Aunque todavía hay retos como la seguridad en horas nocturnas y el mantenimiento de algunos tramos, el Boulevard del Río representa una de las apuestas más exitosas por dignificar el espacio público en Cali.
UN RÍO QUE UNE, UN BOULEVARD QUE INSPIRA.
El Boulevard del Río es hoy un reflejo de la nueva Cali: resiliente, creativa, diversa y en constante transformación. Es un espacio que conecta lo histórico con lo moderno, lo artístico con lo cotidiano, y lo personal con lo colectivo.
A orillas del río que da nombre a la ciudad, este boulevard se ha consolidado como un pulmón cultural que respira arte, memoria, encuentro y vida. Quien camina por él, no solo recorre un tramo urbano, sino que se adentra en el alma de una ciudad que aprendió a mirarse de nuevo desde sus raíces hasta su proyección futura.
“Su divino poder, al darnos el conocimiento de aquel que nos llamó por su propia gloria y excelencia, nos ha concedido todas las cosas que necesitamos para vivir como Dios manda”. 2 Pedro 1:3, (Reina-Valera).
