Presidente de Colpensiones , Jaime Dussán Calderón
En un momento decisivo para el sistema pensional colombiano, Colpensiones reafirmó su compromiso y plena preparación para asumir el reto que implica la implementación de la Ley 2381 de 2024, prevista para entrar en vigor el 1 de julio de 2025. Así lo expresó el presidente de la entidad, Jaime Dussán Calderón, tras conocerse el concepto emitido por la Procuraduría General de la Nación, en el que se solicita a la Corte Constitucional dejar en firme la norma.
“La Procuraduría nos ha dado un respaldo claro. Este concepto es un espaldarazo a la reforma pensional del Gobierno nacional, y en Colpensiones estamos listos para cumplir”, afirmó Dussán con determinación. Según sus declaraciones, la entidad se prepara para recibir a más de 18 millones de colombianos y colombianas que migrarán del régimen privado al público, en lo que calificó como un hito histórico en la protección social del país.
De cara a esta transición, el presidente de la administradora explicó que Colpensiones ha emprendido un proceso profundo de modernización: “El 90 % de los trámites ya se pueden realizar de manera virtual. Además, hemos firmado convenios tecnológicos y estamos afinando los contratos que permitirán una atención eficiente y humana desde el 1 de julio de 2025”.
Dussán también reveló que el Ministerio del Trabajo y Colpensiones entregaron al presidente Gustavo Petro un informe detallado sobre el avance en la implementación de la nueva ley. El objetivo es claro: que para el 1 de mayo del próximo año todos los decretos reglamentarios estén listos y publicados.
Uno de los puntos más sensibles del concepto de la Procuraduría, y que fue subrayado por Dussán, tiene que ver con los derechos ya adquiridos por más de 40 mil personas que, anticipándose a la entrada en vigor de la reforma, trasladaron sus ahorros desde los fondos privados hacia Colpensiones. “Revertir esos movimientos sería jurídicamente complejo y podría desencadenar una oleada de demandas con efectos impredecibles”, señala el documento del Ministerio Público.
Pero más allá de la técnica legal o los desafíos operativos, el corazón de esta reforma —y lo que Colpensiones quiere resaltar— es el impacto humano. “Esta ley ha sembrado confianza y esperanza en millones de colombianos con escasos recursos y empleos precarios, quienes hasta ahora estaban excluidos de cualquier auxilio en su vejez”, dijo Dussán. En sus palabras, se percibe el trasfondo de una deuda histórica que el nuevo modelo pensional busca saldar.
Colpensiones coincide con la Procuraduría en que el país necesita, con urgencia, una reforma pensional. No solo por la insostenibilidad del sistema actual, sino porque millones de personas siguen sin cotizar. “Tenemos 11 millones de colombianos y colombianas por fuera del sistema. La gran campaña que viene es pedagógica: hay que enseñar la importancia de cotizar. Ese es el verdadero reto del Gobierno y de todos los actores sociales”, puntualizó el presidente de la entidad.
Así, mientras se acercan fechas clave para la implementación de la reforma, Colpensiones no solo ajusta su estructura operativa, sino que se alinea con una visión más amplia: la de construir un sistema de seguridad social más justo, más solidario y más humano para el país.
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