El Pembrolizumab Aumenta la Supervivencia Libre de Enfermedad

   MADRID, 13 Nov. (EDIZIONES) – La incorporación del fármaco de inmunoterapia pembrolizumab al tratamiento estándar para pacientes con sarcoma avanzado de tejidos blandos en extremidades ha mostrado una mejora significativa en la supervivencia libre de enfermedad, según los resultados del ensayo clínico SU2C-SARC032, liderado por investigadores de la Universidad de Pittsburgh, UPMC, la Universidad de Duke (todos en EE.UU.) y el Centro Oncológico Princess Margaret, University Health Network (Canadá).

Los hallazgos, publicados en ‘The Lancet’, posicionan al pembrolizumab como una nueva opción terapéutica para quienes padecen esta enfermedad. «El sarcoma de tejidos blandos es un cáncer raro y complejo con más de 50 subtipos distintos, lo que dificulta su estudio en ensayos clínicos de mayor escala», señala la autora principal, la doctora Yvonne Mowery, profesora adjunta de oncología radioterápica en el Centro Oncológico Hillman de Pitt y UPMC.

«Dado que no hemos tenido progresos significativos en el tratamiento de estos pacientes durante años, es realmente alentador que este ensayo demuestre que el pembrolizumab puede mejorar los resultados más allá del estándar actual de atención para pacientes con enfermedad localmente avanzada», añade Mowery.

El autor principal, el doctor David Kirsch, líder del equipo de investigación de Stand Up To Cancer (SU2C), que condujo el ensayo, y director del Programa de Medicina Radiológica en el Centro Oncológico Princess Margaret, menciona que «este ensayo clínico representa un gran avance para los pacientes con los tipos de sarcoma que se incluyeron en nuestro estudio».

«Hemos hallado que la inmunoterapia puede mejorar los resultados de los pacientes con la forma más agresiva de la enfermedad, lo que sugiere que optimizar aún más la inmunoterapia podría aportar beneficios adicionales», concluye.

El sarcoma de tejidos blandos de las extremidades es un conjunto de tumores que se desarrollan en músculos, tendones, grasa, vasos sanguíneos o nervios en brazos y piernas. Alrededor de la mitad de los pacientes con sarcomas grandes y de alto grado experimentan metástasis incurables, por lo que la intervención temprana es esencial, según Mowery.

«Normalmente tratamos a los pacientes con una combinación de cirugía y radioterapia. Algunos también reciben quimioterapia, aunque los datos sobre su eficacia son contradictorios y puede ser muy tóxica. Por esta razón, nos interesaba explorar cómo la inmunoterapia podría mejorar los resultados de los pacientes», explica.

En un total de 20 instituciones en EE.UU., Canadá, Australia e Italia, se inscribieron a pacientes con sarcoma de tejidos blandos de las extremidades en estadio 3, grado 2 o 3, incluyendo dos subtipos: sarcoma pleomórfico indiferenciado y liposarcoma desdiferenciado/pleomórfico. El grupo de control recibió atención estándar, que comprendía radioterapia preoperatoria y cirugía, mientras que el grupo experimental recibió infusiones preoperatorias y posoperatorias de pembrolizumab, además del tratamiento estándar.

De un total de 127 pacientes, la tasa de supervivencia libre de enfermedad a dos años fue del 52% para el grupo de control y del 67% para el grupo experimental, indicando que la adición de pembrolizumab redujo la recurrencia o mortalidad. Como era previsible, los eventos adversos severos fueron más comunes en el grupo experimental (56%) en comparación con el grupo de control (31%), aunque no ocurrieron muertes relacionadas con el tratamiento en ninguno de los grupos. Es relevante resaltar que estos hallazgos sugieren que el pembrolizumab podría ser una alternativa menos tóxica que la quimioterapia.

Aunque los investigadores sostienen que es prematuro afirmar si la adición de pembrolizumab mejora la supervivencia global, continuarán el monitoreo de estos pacientes para responder a esa interrogante. «Con base en nuestro hallazgo de que el pembrolizumab mejoró notablemente la supervivencia libre de enfermedad, esperamos que más médicos integren la inmunoterapia en su práctica para estos pacientes», finaliza Mowery. «Dado que hay opciones efectivas limitadas para pacientes con enfermedad metastásica, nuestra esperanza es que reducir el número de pacientes que desarrollan metástasis conduzca a mejoras en la supervivencia global».