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En un acto público celebrado este viernes en San Basilio de Palenque, Bolívar, el presidente Gustavo Petro destapó un monumental caso de corrupción que ha dejado una profunda huella en las comunidades más vulnerables del país. Durante su intervención, el mandatario reveló que, según las primeras investigaciones, se han identificado robos por un monto inicial de 9,1 billones de pesos en los OCAD Paz y en el sistema de regalías, afectando gravemente el desarrollo de proyectos esenciales para las regiones más necesitadas de Colombia. Sin embargo, horas después de su declaración, el Departamento Nacional de Planeación (DNP) corrigió la cifra, indicando que el desfalco real asciende a 12 billones de pesos, todos ellos desviados durante el gobierno anterior.
“Estamos ante un inmenso robo en Colombia: inicialmente habíamos estimado que la cantidad robada era de 9,1 billones de pesos, pero hoy hemos sido corregidos por el director de Planeación Nacional. El desfalco real, que corresponde al gobierno anterior, es de 12 billones de pesos, una cifra escalofriante que solo refleja la punta del iceberg, ya que apenas hemos revisado el 20% del sistema”, expresó Petro con contundencia frente a la comunidad palenquera.
El presidente Petro detalló que esta denuncia ya ha sido formalmente presentada por el director del Departamento Nacional de Planeación, Alexander López, quien está encargado de iniciar los procesos legales pertinentes para asegurar que los responsables de este masivo saqueo enfrenten las consecuencias judiciales. “El director Nacional de Planeación, Alexander López, está llevando adelante la denuncia oficial, y esperamos que se investigue a fondo y se castigue a quienes han participado en este saqueo que ha perjudicado tanto a nuestro país”, enfatizó Petro, subrayando el compromiso de su gobierno en la lucha contra la corrupción.
Durante su intervención, Petro no solo se centró en el impacto financiero de este desfalco, sino que también hizo énfasis en las devastadoras consecuencias sociales que ha generado, utilizando como ejemplo la situación crítica de San Basilio de Palenque. “Es por este robo que en San Basilio no hay acueducto, no hay planta de tratamiento de aguas residuales para limpiar el río, no hay alcantarillado. Esta no es una situación única de Palenque; se repite en todo el Caribe y en buena parte de la Colombia más pobre, donde las comunidades carecen de los recursos básicos necesarios para una vida digna, como el acceso al agua potable”, lamentó el mandatario.
Petro subrayó que, mientras estos recursos destinados a mejorar la calidad de vida de las comunidades eran desviados, otros proyectos de infraestructura avanzaban rápidamente, favoreciendo a sectores privados a costa de las necesidades básicas de la población. “Carreteras de cuatro calzadas, llenas de peajes, se construyen rápidamente porque son negocios lucrativos para los banqueros. Esas obras se financian con dinero de la nación, mientras que los acueductos y alcantarillados para la gente humilde de Colombia quedan sin recursos. Esa debería ser la verdadera prioridad del Estado”, señaló Petro, criticando la falta de equidad en la asignación de los recursos públicos.
El presidente también abordó el rol pernicioso que la corrupción y la politiquería han jugado en la distribución y ejecución de los proyectos financiados con estos recursos. “¿Saben ustedes por qué devuelven un proyecto a la comunidad? Porque no hay ‘CVY’ (cómo voy yo), porque no va el contratista. La politiquería se ha adueñado de los recursos que deberían estar destinados a mejorar la vida de las personas más necesitadas”, denunció Petro, haciendo un llamado a erradicar estas prácticas corruptas para garantizar un desarrollo justo y equitativo en todo el país.
El impacto del desfalco se extiende más allá de lo económico, ya que también ha profundizado la desigualdad y el rezago social en las regiones más pobres de Colombia. San Basilio de Palenque, un lugar emblemático por su historia y resistencia, sigue enfrentando graves carencias en servicios básicos, a pesar de su potencial cultural y turístico. “Es inaceptable que lugares como Palenque, que deberían ser motores de desarrollo cultural y económico, sigan en el abandono por culpa de la corrupción y la mala administración de recursos. Nuestro compromiso es revertir esta situación y garantizar que los recursos públicos se utilicen de manera transparente y eficiente”, aseguró el presidente.
El acto en San Basilio de Palenque, donde Petro realizó estas revelaciones, también marcó el compromiso del Gobierno del Cambio con la reparación integral y la superación del rezago en la garantía de los derechos de las comunidades palenqueras. Petro reiteró su promesa de combatir la corrupción en todas sus formas y reorientar los recursos del Estado hacia las necesidades más urgentes de la población, especialmente en las regiones que han sido históricamente olvidadas y marginadas.
Finalmente, Petro concluyó su intervención con un llamado a la ciudadanía para que se mantenga vigilante y exija transparencia en la administración de los recursos públicos. “No podemos permitir que se sigan robando el futuro de nuestras comunidades. La corrupción no solo es un delito, es un atentado contra la dignidad de los colombianos. Es hora de cambiar el rumbo y construir un país donde todos tengan acceso a los recursos y oportunidades que merecen”, finalizó el presidente, dejando en claro que su gobierno no descansará hasta erradicar estas prácticas corruptas y asegurar que los recursos del país se utilicen para el bienestar de todos.
carloscastaneda@prensamercosur.org
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