La FDA destaca la importancia de esta decisión al reconocer que el riesgo de transmisión de ITS durante el coito anal es considerablemente mayor que durante el coito vaginal. Courtney Lias, directora del área de urología de la FDA, resalta que esta autorización es fundamental para promover la equidad en salud al desarrollar productos seguros y efectivos que atiendan las necesidades de diversas poblaciones.
El condón aprobado es fabricado por la marca One y fue sometido a rigurosas pruebas en las que participaron 504 hombres de diferentes orientaciones sexuales. Los resultados demostraron una tasa de falla del condón del 0,68 % para las relaciones sexuales anales y del 1,89 % para las relaciones vaginales, lo que respalda su eficacia en la prevención de ITS.
A pesar de algunos deslizamientos o roturas durante el uso, los efectos adversos encontrados fueron mínimos, con solo un 0,64 % de los participantes reportando síntomas de ITS. Es importante destacar que estos casos podrían haber ocurrido ante el uso del condón.
La decisión de la FDA ha sido recibida con entusiasmo por parte de One, quien considera este acontecimiento como un cambio histórico en la industria de los preservativos. Davin Wedel, fundador de la marca, enfatiza que esta aprobación brindará mayor confianza a las personas al usar condones durante el sexo anal.
One planea lanzar tres tipos de condones al mercado: estándar, delgados y personalizables, estos últimos disponibles en 54 tamaños diferentes para adaptarse a las necesidades individuales de los usuarios. Aunque aún no se ha revelado el precio, esta innovación representa un avance significativo en la promoción de la salud sexual.
En un contexto donde más de un millón de personas adquieren ITS diariamente, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), la disponibilidad de condones diseñados específicamente para el sexo anal juega un papel crucial en la prevención de estas enfermedades, especialmente considerando que la mayoría de los casos son asintomáticos.