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El pasado 12 de febrero, el Gobierno Nacional declaró la emergencia carcelaria en todos los centros penitenciarios de Colombia, motivado por los recientes ataques contra el personal de guardia del Instituto Nacional Penitenciario y Carcelario (Inpec). En respuesta a esta situación crítica, el viceministro de Política Criminal y Justicia Restaurativa, Camilo Umaña, lideró una significativa reunión con los directores, comandantes de vigilancia y cónsules de derechos humanos de los 126 centros penitenciarios del país.
Durante el encuentro virtual, Umaña expresó su solidaridad y respaldo a los directivos de las cárceles, reconociendo la complejidad de su labor diaria y la importancia de preservar el orden y las condiciones de la población privada de libertad. La emergencia carcelaria fue declarada después de dos homicidios de guardias en Cúcuta y Cartagena, cinco atentados y 10 amenazas directas contra funcionarios del sistema penitenciario en lo que va del año.
El viceministro subrayó la gravedad de perder vidas de guardias, calificándolo como un fracaso para el sistema y el Estado colombiano en general. En su discurso, aseguró a los presentes que el Ministerio brindará apoyo, respaldo y cercanía suficientes, reconociendo la ardua tarea de gestionar las cárceles y cuidar a tantas personas diariamente.
Umaña explicó que la emergencia carcelaria se fundamenta en dos pilares: la protección de la vida e integridad de la guardia y el aumento de la extorsión desde las cárceles. Para abordar estos problemas, anunció medidas concretas, como la colaboración con la Fiscalía General de la Nación para designar un fiscal y 10 policías judiciales dedicados exclusivamente a investigar casos de hostigamiento y amenazas contra funcionarios del Inpec.
Asimismo, se coordinó con la fuerza pública para garantizar asistencia perimetral en los centros penitenciarios, especialmente durante los cambios de turno y desplazamientos fuera de las cárceles. En situaciones de amenazas o riesgos potenciales, se considerarán traslados o ajustes en la situación laboral de los funcionarios para garantizar la protección adecuada.
El viceministro también mencionó la posibilidad de proporcionar un seguro de vida colectivo para los funcionarios del Inpec y reiteró la lucha frontal contra la extorsión desde las cárceles mediante estrategias como la Operación Dominó y mesas de diálogo con operadores de telefonía para restringir las comunicaciones en los establecimientos penitenciarios.
Umaña, destacó la importancia de la comunicación transparente por parte de los directores de las cárceles para informar claramente sobre los impactos de la emergencia carcelaria en las personas privadas de la libertad y sus familias. Enfatizó la necesidad de humanizar el sistema penitenciario, recordando que todos los involucrados son personas con familia, intereses y deseos de progresar. Concluyó llamando a acciones concretas que hagan que el sistema sea más seguro para todos los implicados.
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