
Dios nos creó para Su gloria. Nos creó «a imagen Suya» (Gn 1:27). Fuimos creados para reflejarlo y mostrarlo, para ser monumentos móviles de la fuerza y la belleza de Dios, no estatuas inmóviles. Somos imágenes vivientes de Dios mismo, que respiramos, hablamos, trabajamos, nos movemos y salimos al mundo que Él creó para mostrar Su gloria en todas partes. Él pensó que era mejor que Sus imágenes no estuvieran fijas al suelo como los árboles y las plantas, sino que tuvieran pies, piernas, brazos y manos para moverse, extenderse y llenar la tierra con Su gloria.
Sin duda, Dios tiene formas espectaculares de glorificarse a Sí mismo a través de la discapacidad. Pero, por lo general, algún tipo de esfuerzo físico se convierte en la ocasión para reflejarlo en el mundo. Para rendirle honor, presentamos nuestros «cuerpos como sacrificio vivo» (Ro 12:1, énfasis añadido). El versículo siguiente dice: «Y no se adapten a este mundo, sino transfórmense mediante la renovación de su mente» (v. 2); esto para que puedan presentar su cuerpo «santo, aceptable a Dios» (v. 1).
Al igual que el rey David y Cristo mismo, recibimos el cuerpo que Dios ha preparado para nosotros como nuestro instrumento para hacer Su voluntad (Sal 40:6-8; He 10:5-7). Y Cristo «mismo llevó nuestros pecados en Su cuerpo sobre la cruz, a fin de que muramos al pecado y vivamos a la justicia» (1 P 2:24, énfasis añadido). El apóstol Pablo esperaba y deseaba ansiosamente que «Cristo [fuera] exaltado en [su] cuerpo, ya sea por vida o por muerte» (Fil 1:20, énfasis añadido).
Dondequiera que vayas
Glorificar a Dios con nuestros cuerpos no se trata principalmente de lo que evitamos y no hacemos con ellos. Es algo que va mucho más allá, y se trata de lo que sí hacemos con ellos: a dónde vamos con nuestros pies, lo que hacemos con nuestras manos para ayudar a otros y lo que decimos con nuestras bocas para dar significado a las acciones de nuestros cuerpos.
Somos imágenes vivientes de Dios, que respiramos, hablamos, trabajamos, nos movemos y salimos al mundo que Él creó para mostrar Su gloria
Consideremos la vida de Cristo, una historia que supone un esfuerzo físico de principio a fin. Él es la imagen culminante del Dios invisible (2 Co 4:4; Col 1:15) que vivió perfectamente para la gloria de Su Padre (Jn 17:4, 6, 26). Incluso una lectura superficial de los evangelios deja claro que Él no vivió nada parecido a la vida sedentaria que atrapa a tantos hoy en día. Aparte de lo obvio —sin automóviles, trenes, aviones, pantallas, teléfonos, medicinas modernas ni alimentos procesados—, Jesús caminaba esencialmente a todos los lugares a los que iba. Se movía y pasaba la mayor parte del tiempo que estaba despierto de pie, como lo hacían la mayoría de los seres humanos de la clase trabajadora en el mundo antiguo.
Vemos lo mismo con Pablo en los Hechos y en sus cartas. Cuando viajaba, un día de viaje suponía entre 32 y 40 kilómetros (básicamente, caminaba una maratón). Cuando no viajaba, fácilmente caminaba ocho kilómetros (unos 10 000 pasos) o más haciendo su trabajo diario como constructor o fabricante de tiendas.
Y Jesús no solo movía los pies, sino también las manos: levantando, cortando, rasgando, empujando, sosteniendo, tirando. Trabajó en la construcción durante décadas, ya que creció en el hogar de un comerciante. Y aunque era «Varón de dolores» (a causa de nuestro pecado) y «experimentado en aflicción» (Is 53:3), los evangelios nos dan una y otra vez la impresión de que era profundamente feliz y emocionalmente estable, lo suficientemente feliz como para bendecir a los demás mediante una enseñanza incansable y una sanación inconveniente, para prometer recompensas, para mostrar compasión y para controlar Su ira justa. Al menos, esas acciones normales y cotidianas significaban que Su salud emocional no se veía afectada por un estilo de vida sedentario.
Todo lo que hagas
No pasemos esto por alto con demasiada prisa. Dios te creó para Su gloria, y nuestro primer llamado como cristianos es glorificarlo, honrarlo y hacer que Él se vea bien en y a través de nuestras vidas.
Nuestro propósito es que vivamos en esta creación como Dios mismo viviría si fuera una criatura en el mundo que ha creado
Eso es lo que significa ser creados a Su imagen (Gn 1:27). ¿Y qué hace una imagen? Representa. Refleja. Exhibe. Hace visible. Dios nos creó para que lo representemos, lo reflejemos y lo exhibamos en este mundo creado. Nuestro propósito es que vivamos en esta creación como Dios mismo viviría si fuera una criatura en el mundo que ha creado. Y Dios mismo sí entró a nuestro mundo en forma de criatura, como un ser humano.
La Segunda persona de la Divinidad eterna vino como hombre, como Jesús de Nazaret. Nosotros somos creados a imagen de Dios. Jesús es la imagen de Dios (2 Co 4:4; Col 1:15). Él era Dios mismo entre nosotros (Jn 1:14). Él vivió Su vida humana en cumplimiento de los designios de Dios, glorificándolo perfectamente. Ese es nuestro llamado como cristianos. No ser Jesús. No ser Dios como hombre. Sino vivir cada vez más a la altura del llamado de vivir a imagen de Dios, tal como Jesús lo modeló y lo cumplió de manera perfecta. Por lo tanto, «ya sea que coman, que beban, o que hagan cualquier otra cosa, háganlo todo para la gloria de Dios» (1 Co 10:31).
Una vez más, glorificar a Dios con nuestros cuerpos no se trata principalmente de lo que no hacemos. Es fácil centrarse en los actos indebidos de los que debemos abstenernos, pero glorificar a Dios en nuestros cuerpos es, ante todo, una búsqueda positiva y una oportunidad. Así como en la parábola de los talentos, nuestros cuerpos son dones que Dios nos ha dado para hacerlos crecer y desarrollar, no para enterrarlos y dejarlos languidecer.
Publicado originalmente en The Gospel Coalition. Traducido por María del Carmen Atiaga.
David Mathis
Fuente de esta noticia: https://www.coalicionporelevangelio.org/articulo/glorificar-dios-cuerpos-no-hacemos/
También estamos en Telegram como @prensamercosur, únete aquí: https://t.me/prensamercosur Mercosur
Recibe información al instante en tu celular. Únete al Canal del Diario Prensa Mercosur en WhatsApp a través del siguiente link: https://www.whatsapp.com/channel/0029VaNRx00ATRSnVrqEHu1W
