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Colombia vivió una jornada decisiva que dejó al país frente a una hoja de ruta renovada para garantizar la igualdad. Durante tres días, entre el 1 y el 3 de diciembre de 2025, más de 300 participantes -entre líderes sociales, especialistas, académicos, artistas y ciudadanos con distintas capacidades- se reunieron en Bogotá para trazar una nueva visión nacional sobre la discapacidad, un ejercicio colectivo sin precedentes que redefinió prioridades y compromisos institucionales.
Convocado por el Ministerio de Igualdad y Equidad, y respaldado por la Dirección de Veteranos y Rehabilitación Inclusiva, el Departamento Nacional de Planeación y el Departamento Administrativo de la Función Pública, el encuentro se convirtió en un espacio que trascendió lo técnico y lo administrativo. Fue, ante todo, un escenario vivo donde la diversidad se expresó en debates, propuestas y manifestaciones artísticas que mostraron la dimensión humana detrás de cada política pública.
El trabajo desarrollado, alimentado por voces provenientes de múltiples territorios, consolidó la Agenda Nacional por la Discapacidad y dejó avances tangibles que marcan el inicio de un ciclo de transformación. En el corazón de estas conclusiones se encuentra el impulso al nuevo CONPES de Discapacidad 2026–2035, el fortalecimiento de lineamientos que buscan garantizar la inclusión laboral, la modernización integral del Sistema Nacional de Discapacidad y la promoción del protocolo facultativo de la Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad ante el Congreso, un paso clave para blindar jurídicamente la protección de derechos.
En paralelo al debate político y técnico, el encuentro se convirtió en una celebración de las capacidades y del talento como motores del cambio. Una obra teatral interpretada por artistas con discapacidad, “Liga de Súper Capacidades”, recordó que la cultura es también un instrumento de dignificación. Niñas y niños del centro Renacer y Crecer Los Ángeles llenaron de música los pasillos del Ministerio, recordando que la inclusión se aprende desde la infancia y se ejerce día a día. La presentación de la Banda Filarmónica de Zipaquirá cerró las jornadas con un mensaje simbólico: la igualdad también se construye desde el arte.
La conferencia de clausura, centrada en el modelo de vida independiente y sus desafíos en América Latina, reunió experiencias locales e internacionales que subrayaron la necesidad de impulsar sistemas de apoyo que permitan a las personas con discapacidad ejercer su autonomía sin barreras. Durante el encuentro, el Gobierno expuso avances concretos en inclusión laboral en el sector público, un campo donde las brechas aún son latentes, pero donde se ha fijado una hoja de ruta para que el acceso al empleo sea una realidad verificable y no una promesa aplazada.

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“El compromiso es construir un país donde las personas con discapacidad puedan ejercer plenamente sus derechos y vivir con dignidad, autonomía y libertad. No se trata de un gesto simbólico, sino de una transformación estructural que avanza en todo el territorio nacional”, afirmó el ministro de Igualdad y Equidad, Juan Carlos Florián Silva, al cierre del evento.
El Gobierno del Cambio, liderado por el presidente Gustavo Petro, reafirma así que la inclusión no es una concesión, sino un derecho innegociable. Con esta agenda, Colombia consolida un avance significativo hacia un país donde cada persona, sin excepción, pueda desenvolverse en igualdad de condiciones, participar plenamente en la vida social y acceder a oportunidades reales. Lo vivido en Bogotá no solo recoge la voz de cientos de ciudadanos: proyecta la convicción de que un país más justo es posible y que la inclusión, lejos de ser un ideal distante, empieza a convertirse en una experiencia diaria para millones de colombianos.
carloscastaneda@prensamercosur.org
