
A pesar de la heladas de julio, que afectaron a las parcelas sembradas muy tempranamente, el trigo dejó un balance positivo para el campo, con buena calidad de grano para la industria nacional y el mercado de exportación.
De acuerdo con las recorridas y toma de muestras de campos hechas por la Cámara Paraguaya de Exportadores y Comercializadores de Cereales y Oleaginosas se sembraron un aproximado de 349.425 hectáreas (con un margen de error de 5%).
“Excepto las siembras tempranas que sufrieron de las heladas en el mes de junio y fueron afectadas por la Piricularia, los rendimientos en general son excelentes. Se espera que el promedio nacional llegue a un récord de entre 3.000Kg/ha a 3.200 kg/ha y la producción entre 1.100.000 a 1.200.000 toneladas”, comentó el Dr. Mohan Kohli, líder del Programa Nacional de Investigación de Trigo de Paraguay y asesor internacional del gremio.
Desde Alto Paraná, el productor Rubén Sanabria coincidió en que el clima contribuyó para lograr un buen rendimiento, con un promedio estimado de entre 2.800 kg/ha a 3.000 kg/ha de producción.
“No tenemos resultados finales, pero los rendimientos fueron buenos gracias a los cuidados brindandos por el productor y las condiciones climáticas favorables”, agregó y recordó que la buena calidad del trigo nacional mantiene una alta demanda, especialmente en los molinos de la región y en el estado de Paraná, Brasil.
El trigo es un cultivo clave en la rotación agrícola y en la generación de ingresos para los productores. Esta campaña 2025 se caracterizó por condiciones climáticas favorables. A pesar de la heladas de julio, que afectaron a las parcelas sembradas muy tempranamente, el trigo dejó un balance positivo para el campo, con buena calidad de grano para la industria nacional y el mercado de exportación.
Con estos resultados, el trigo reafirma su importancia dentro del sistema de rotación agrícola nacional y su aporte a la diversificación productiva.
