20 recetas de Navidad fáciles para preparar el día anterior

El salmón marinado es una receta sencilla y elegante que siempre triunfa en las mesas navideñas. Además, es perfecto para prepararlo con antelación, ya que necesita tiempo para que los sabores se impregnen. Solo necesitas mezclar sal, azúcar, eneldo y especias, cubrir el salmón fresco y dejarlo reposar en la nevera durante al menos 24 horas.

Una vez listo, simplemente corta el salmón en finas láminas y sírvelo con tostadas, crema agria o unas gotas de limón. También puedes dejarlo marinado hasta dos días antes, asegurándote de mantenerlo bien refrigerado. Este plato es práctico, delicioso y aporta un toque sofisticado sin apenas esfuerzo.

Los volovanes rellenos son un clásico en las mesas festivas, y lo mejor es que puedes tener los rellenos preparados el día anterior. Desde opciones cremosas hasta más frescas, se adaptan a todos los gustos y permiten ahorrar tiempo en la cocina. Algunas ideas fáciles y versátiles son:

• Champiñones en salsa de nata: Una combinación cremosa con ajo y un toque de perejil.
• Ensaladilla de marisco: Con palitos de surimi, gambas y mayonesa, lista para servir fría.
• Paté de hígado o foie con manzana caramelizada: Una mezcla sofisticada y fácil de preparar con antelación.
• Relleno de atún y queso crema: Fresco y rápido, perfecto para un toque ligero.
• Revuelto de espinacas y queso azul: Una opción caliente y sabrosa para los amantes de los quesos fuertes.

Prepara el relleno con tiempo, guárdalo en recipientes herméticos y rellena los volovanes justo antes de servir para que mantengan su textura crujiente. ¡Así no tendrás que preocuparte por nada el gran día! Nosotros te dejamos aquí varias recetas detalladas para que elijas tu favorita:

La sopa de marisco es un imprescindible de las mesas navideñas por su intensidad de sabor y su toque marinero, que siempre triunfa como entrante. Puedes cocinarla con antelación sin problemas, ya que al dejarla reposar, los sabores del fumet casero y los mariscos como gambas, almejas, mejillones y trozos de pescado se potencian.

Solo necesitas prepararla el día anterior, guardarla en la nevera y recalentarla a fuego suave cuando la vayas a servir. Además, puedes añadir los mariscos más delicados, como las gambas, al último momento para que no pierdan textura. Es una receta práctica y deliciosa que garantiza el éxito en cualquier comida especial.

El cóctel de gambas con piña es un clásico de las mesas navideñas en España, conocido por su frescura y combinación de sabores dulces y salados. Esta receta es muy fácil de preparar y puedes dejarla prácticamente lista con antelación, lo que la convierte en una opción perfecta para quienes buscan practicidad.

La lombarda con manzana es un plato clásico de la cocina navideña en España, especialmente en Madrid. Este acompañamiento combina el sabor ligeramente dulce de la lombarda con la frescura y acidez de la manzana, creando un equilibrio perfecto para acompañar carnes asadas o platos principales más contundentes.

Es una receta ideal para adelantar: basta con cocer la lombarda con un poco de cebolla y añadir trozos de manzana al final de la cocción. Si lo deseas, puedes añadir un toque de vino tinto o vinagre para realzar el sabor. Una vez lista, guárdala en la nevera y caliéntala antes de servir. Es sencilla, nutritiva y aporta un toque de color y tradición a cualquier mesa navideña

La crema de nécoras es un clásico de la cocina navideña que destaca por su sabor intenso y su textura suave. Esta receta, perfecta para quienes buscan un primer plato especial, puede prepararse con antelación, ya que su sabor mejora después de reposar.

Elaborarla es sencillo: tras preparar un fumet con las nécoras, se combina con un sofrito de verduras, un toque de tomate y especias. Una vez triturada y pasada por un colador fino, tendrás una crema lista para guardar en la nevera. Al servirla, caliéntala suavemente y añade un chorrito de nata o brandy para un resultado espectacular.

Puedes preparar el bizcocho y el relleno el día anterior, montarlo y guardarlo en la nevera envuelto en papel film para que mantenga su frescura. Antes de servir, decora con mayonesa, huevas o perejil picado para darle un acabado especial. Es un plato ligero, delicioso y muy práctico para sorprender a tus invitados

El lomo de cerdo relleno es una de esas recetas que impresionan en la mesa y, al mismo tiempo, resultan muy prácticas porque se pueden preparar con antelación. Puedes rellenarlo con ingredientes como frutos secos, espinacas, jamón, queso o una mezcla de carne picada y especias, según tus gustos. En nuestra receta va relleno con arándanos, pistachos, manzana y pechuga de pollo, aderezado con una salsa de naranja que le aporta sabor y jugosidad.

El truco está en cocinar el lomo relleno el día anterior, dejándolo jugoso y bien sazonado. Luego, solo tendrás que calentarlo suavemente antes de servir. Si lo acompañas con una salsa, como la salsa de naranja que te mostramos, también puedes prepararla el día antes y recalentarla al momento. Así disfrutarás de un plato principal completo y lleno de sabor, sin estrés de última hora.

El pollo relleno es una receta tradicional que nunca falla en las celebraciones, y lo mejor es que se presta perfectamente a ser preparada con antelación. Con un relleno que puede incluir carne picada, frutos secos, higos, manzanas, pasas, especias y hasta un toque de licor, es un plato versátil y lleno de sabor.

Cocina el pollo hasta que quede bien dorado y jugoso, y consérvalo en la nevera envuelto en papel de aluminio. Al día siguiente, bastará con calentarlo suavemente en el horno. Para acompañarlo, prueba con una salsa de cítricos, como naranja o limón, que aporta frescura, o una salsa cremosa de champiñones para un toque más tradicional. De esta manera, tendrás un plato principal festivo, organizado y lleno de sabor.

Los canelones de San Esteban son un plato típico de Cataluña, perfecto para aprovechar las sobras de carne del día de Navidad. Este plato es ideal para prepararlo con antelación, ya que puedes dejar listos los canelones rellenos y cubrirlos con la salsa bechamel el día anterior.

El relleno tradicional incluye carnes asadas como pollo, ternera o cerdo, mezcladas con sofrito de cebolla y tomate, lo que les da un sabor increíblemente reconfortante. Solo tendrás que guardarlos en la nevera y, antes de servir, añadir el queso rallado y gratinarlos al horno hasta que queden dorados y crujientes por encima. Con esta receta tendrás un plato tradicional, práctico y que siempre triunfa en la mesa.

El confit de pato es una receta francesa que se ha ganado un lugar en las mesas festivas por su sabor único y su textura tierna y jugosa. Lo más práctico de este plato es que el confit suele venir listo para calentar (aunque nosotros también te enseñamos a confitar pato en casa), por lo que puedes centrarte en preparar guarniciones y salsas con antelación para acompañarlo.

Una opción clásica es servirlo con patatas confitadas o un puré de castañas, ambos platos que puedes dejar listos el día anterior. También puedes añadir un toque especial con una salsa de naranja con un toque de miel y especias, preparada con tiempo y simplemente calentada al servir. Así, el confit de pato se convierte en una opción fácil y sofisticada, perfecta para disfrutar sin estrés.

El jamón asado al horno es una receta clásica que siempre triunfa en las celebraciones navideñas por su sabor y su versatilidad. Este plato combina el toque salado del jamón con glaseados dulces o especiados, como miel, mostaza, o incluso cítricos, creando un equilibrio irresistible.

Ademñas puedes prepararlo con antelación: cocina el jamón hasta que esté tierno y jugoso, y guarda los jugos de la cocción para recalentar y glasear antes de servir. Si quieres ahorrar aún más tiempo, acompáñalo con guarniciones que también puedas dejar listas, como patatas asadas o un puré de manzana. Este jamón se convertirá en la estrella de la mesa con mínimo esfuerzo el día de la comida.

El puré de boniato es una guarnición versátil y llena de sabor que acompaña perfectamente platos principales como carnes asadas o pescados. Su textura cremosa y su toque dulce lo convierten en una opción ideal para incluir en las celebraciones navideñas.

Puedes cocinar los boniatos, triturarlos y mezclar el puré con mantequilla, nata y un toque de especias como canela o nuez moscada el día anterior. Guárdalo en la nevera y simplemente caliéntalo antes de servir. Si quieres darle un extra de sabor, puedes decorarlo con frutos secos tostados o un poco de miel. Una guarnición fácil, deliciosa y con mucha personalidad.

El timbal de verduras es una opción perfecta para quienes buscan un plato ligero y vistoso para las comidas festivas. Con capas de verduras asadas o salteadas como calabacín, berenjena, pimientos y cebolla, este plato es tan sabroso como saludable, además de sencillo de preparar.

Puedes dejar listas las verduras asadas o salteadas el día anterior y montarlas en el molde justo antes de servir. Para un toque extra, acompaña con una salsa ligera, como un pesto de albahaca o una crema de queso, que también puedes preparar con antelación. Así tendrás un plato lleno de color y sabor, listo sin esfuerzo en el último momento.

El flan de turrón es uno de esos postres navideños que combina tradición y sencillez, perfecto para terminar una comida especial. Lo mejor es que puedes prepararlo con uno o dos días de antelación, ya que necesita tiempo para cuajar y reposar en la nevera, lo que además intensifica su sabor.

La receta se elabora con ingredientes básicos como turrón blando, leche, huevos y azúcar. Una vez listo, solo tendrás que desmoldarlo justo antes de servirlo y decorarlo con almendras laminadas, nata montada o un toque de caramelo. Es un postre práctico, fácil de hacer y con el auténtico sabor de la Navidad.

La sopa de almendras dulce es un postre típico de la Navidad en España, especialmente popular en regiones como Castilla y León y Andalucía. Este plato combina almendras molidas, leche, azúcar y un toque aromático de canela o piel de limón, creando una textura cremosa y un sabor suave que recuerda a la cocina casera más auténtica.

Una de las grandes ventajas de esta receta es que puedes prepararla con antelación. Basta con cocinarla, dejarla enfriar y guardarla en la nevera. Antes de servir, caliéntala a fuego bajo y decórala con almendras laminadas o canela en polvo. Es un postre que evoca tradición y dulzura, perfecto para cerrar cualquier celebración navideña.

La gelatina mosaico de leche es un postre divertido y visualmente atractivo, perfecto para añadir un toque festivo a tu mesa navideña. Este dulce combina cubos de gelatina de colores con una base cremosa de gelatina de leche, logrando un contraste de sabores y texturas irresistible.

Lo mejor de esta receta es que puedes prepararla con mucha antelación. Solo necesitas hacer las gelatinas de colores por separado, cortarlas en cubos y mezclarlas con la base de leche, que se elabora con leche condensada, crema y grenetina. Una vez lista, refrigérala hasta que cuaje por completo. Este postre es ideal para servir frío, aportando frescura y un toque alegre a tus celebraciones.

El bizcocho de Navidad casero es una receta sencilla y versátil que aporta el toque dulce perfecto a estas fechas. En este caso se trata de un divertido y original bizcocho que guarda una sorpresa dentro que encantará a tus invitados.

Puedes hornearlo uno o dos días antes, ya que al reposar su sabor mejora y se mantiene jugoso si lo guardas bien envuelto. Antes de servir, dale un toque festivo con azúcar glas por encima, frutas confitadas o incluso un glaseado. Este bizcocho es perfecto tanto para el desayuno como para el postre, y se adapta a cualquier ocasión navideña.

Preparar un panettone casero es una de las tradiciones más especiales de la Navidad. Este pan dulce italiano, famoso por su esponjosidad y su mezcla de frutas confitadas o chocolate, requiere tiempo y dedicación, pero puedes elaborarlo con días de antelación, ya que se mantiene fresco si se conserva adecuadamente.

La masa enriquecida, con mantequilla, huevos y aromas como la vainilla o el limón, necesita varios levados, pero el resultado es un panettone tierno y lleno de sabor. Una vez horneado, simplemente guárdalo bien envuelto en papel film o en una bolsa hermética. Será el acompañamiento perfecto para desayunos, meriendas o como postre en cualquier comida navideña.

Y no podía faltar en esta lista el roscón de Reyes casero, una de las recetas más emblemáticas para cerrar las fiestas navideñas. Con su masa esponjosa y aromática, decorada con frutas confitadas y azúcar, este dulce tradicional puede prepararse con tranquilidad el día anterior, dejando la cocina libre de prisas el 6 de enero.

Tras hornearlo, guárdalo bien envuelto para que conserve su frescura. Si quieres rellenarlo con nata, trufa o crema, puedes hacerlo justo antes de servirlo para que esté perfecto. No hay nada como un roscón hecho en casa para compartir y disfrutar en familia mientras se espera a los Reyes Magos.