En una labor articulada entre el Ministerio del Interior, el Grupo Fondo y la Dirección de Asuntos Étnicos de la Unidad de Restitución de Tierras, se validó el Plan de Acción Inmediata para el cumplimiento de la sentencia judicial a favor de esta comunidad indígena.
El Gobierno Nacional ha dado un paso significativo en la defensa de los derechos de los pueblos ancestrales del país con el lanzamiento de un plan de acción destinado a cumplir un fallo a favor del Resguardó Mayor Issa Oristuna, ubicado en Valledupar, Cesar, y perteneciente al pueblo indígena Ette Ennaka. La iniciativa, promovida por el Ministerio del Interior, la Dirección de Asuntos Étnicos (DAE) de la Unidad de Restitución de Tierras (URT) y el Grupo Fondo, busca fortalecer la presencia institucional en los territorios y asegurar la protección de los derechos de las comunidades indígenas, víctimas del conflicto armado.
Durante los días 9 y 10 de diciembre, Acxan Duque Gámez, director de Asuntos Étnicos de la URT, se reunió en Valledupar con autoridades locales y representantes de las comunidades para evaluar la formulación y validación del Plan de Acción Inmediata en beneficio del pueblo Ette Ennaka. Este plan tiene como objetivo cumplir con las órdenes judiciales emanadas por los jueces especializados en Restitución de Tierras y fortalecer los proyectos productivos que garanticen la autonomía alimentaria y la seguridad territorial de la comunidad indígena.
“El compromiso de la Unidad, a través del Grupo Fondo, es asegurar el cumplimiento de las sentencias judiciales y trabajar en proyectos que beneficien a las comunidades étnicas, especialmente en su proceso de reparación integral. Estamos trabajando con todas las entidades del Estado involucradas para que este plan sea efectivo y para que los derechos del pueblo Ette Ennaka sean finalmente reconocidos y protegidos”, afirmó Duque Gámez.
El proceso de construcción de este plan se basó en la participación activa de la comunidad Ette Ennaka, quienes a través de jornadas de alistamiento, formulación, validación y aprobación cívica, han tenido un papel central en la toma de decisiones sobre los proyectos que se implementarán en su territorio. Esto responde a la necesidad de asegurar la supervivencia física y cultural de la comunidad, fortaleciendo sus sistemas de conocimiento y mejorando sus condiciones socioeconómicas en el marco de la autonomía garantizada por el Acuerdo de Paz.
Además de los esfuerzos por garantizar la restitución de tierras, la URT destacó el avance de los proyectos de seguridad y autonomía alimentaria que se vienen ejecutando en las distintas comunidades y asentamientos del pueblo Ette Ennaka. Estos proyectos son fundamentales para promover la autosuficiencia de la población, reducir la dependencia de ayudas externas y fomentar la resiliencia ante los impactos del conflicto armado.
Con este nuevo esfuerzo, la Unidad de Restitución de Tierras reafirma su compromiso con la justicia social y el cumplimiento de los derechos territoriales de los pueblos étnicos de Colombia, extendiendo su presencia en el territorio para garantizar la efectividad de los programas de restitución. A través de un enfoque diferencial, el Gobierno Nacional continúa impulsando un proceso transformador que permita a las comunidades indígenas vivir con dignidad y autonomía, en armonía con su cultura y sus tradiciones.
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