Sopa de tomate. Receta fácil y tradicional

La sopa de tomate es un forma ideal de consumir tomates y para mi es perfecta ya que ahora que viene el mal tiempo en pleno otoño apetecen recetas de sopas para combatir el frío, para mi la mejor para el frio, la sopa de ajo.

Esta sopa de tomate casera es la de mi abuela, la hacia muchísimo en el pueblo, pero sé que muchos recordaréis esta receta como la de las latas de sopa de tomate americanas de la marca Campbell, del famoso cuadro de Andy Warhol. Hoy hacemos la receta de sopa de tomate de mi abuela, la mejor.

Respecto a los ingredientes os recomiendo usar tomates muy maduros, ya que si no están maduro no va a salir una sopa con un color rojo intenso como el que queremos. Además si le pones pimiento rojo le vas a subir un tono de color y además aportarle algo de dulzor para quitar la acidez del tomate.

Normalmente consumimos el tomate en sofritos o en salsa de tomate frito y en ensalada de tomate como no. Por lo que si te sobran tomates de la receta de sopa de tomate puedes hacer estas otras recetas como segundo plato.

• 1 kilo de tomates pera maduros
• 1 cebolla
• 1 diente de ajo
• 1 pimiento rojo
• Caldo de verduras o caldo de pollo
• Sal
• 1 cucharada de azúcar
• 1 hoja de laurel
• Aceite de oliva virgen extra

Cómo hacer sopa de tomate

1.- Comenzamos pochando en aceite de oliva la cebolla, el ajo y el pimiento rojo. Que se poche bien durante unos 15 minutos.

2.- Pasado ese tiempo, añadimos los tomates troceados. Hay personas que los pelan previamente pero a mi me gusta añadirlos y cocinarlos por completo y luego colar la sopa para que quede muy fina. Rehogamos muy bien durante otros 20 minutos.

3.- Cubrimos con caldo de verduras o caldo de pollo y cocemos 20 minutos. En este punto le puedes poner laurel o tomillo que le va genial.

4.- Trituramos muy bien la sopa y en este punto la probamos y vamos poniendo poco a poco un pelín de azúcar por si está muy ácida.

5.- La pasamos por un colador para retirar los restos de pepitas y pieles y servimos la sopa de tomate caliente con unos picatostes caseros o unas rebanadas de pan tostado por encima.