Además, fueron establecidos sitios para la distribución de sacos de arena en el suroeste y centro del estado, y se anunciaron cierres de escuelas en varios distritos costeros
Florida se prepara para enfrentar una de las evacuaciones más grandes desde el huracán Irma en 2017, mientras el huracán Milton se aproxima a la costa del Golfo. La tormenta tropical se convirtió este domingo en un huracán de categoría 1 después de que sus vientos se intensificaran hasta los 129 kilómetros por hora, según informó el Centro Nacional de Huracanes de Estados Unidos.
Según FOX Weather, se espera que Milton toque tierra cerca del área metropolitana de Tampa como un huracán de categoría 3, afectando a ciudades importantes a lo largo del corredor de la Interestatal 4, incluyendo Orlando.
El Centro Nacional de Huracanes pronosticó que Milton se convertirá en un huracán mayor antes de su llegada a Florida esta semana. Las autoridades de gestión de emergencias del estado están preparándose para una evacuación a gran escala, similar a la que se realizó durante el huracán Irma.
Kevin Guthrie, director ejecutivo de la División de Manejo de Emergencias de Florida, llamó a los residentes a completar sus preparativos y seguir las órdenes de evacuación.
“Insto a los floridanos a que finalicen ya sus preparativos para la tormenta; pongan en marcha su plan. Les recomiendo encarecidamente que evacuen. Nos estamos preparando, y tengo el Equipo de Respuesta de Emergencia del Estado de preparación, para la mayor evacuación que hemos visto muy probablemente desde 2017 huracán Irma”, dijo Guthrie el domingo.
Las evacuaciones comenzaron en algunas áreas, con órdenes obligatorias para Anna Maria Island y ciertas zonas de Pinellas y Manatee. Además, se han establecido sitios para la distribución de sacos de arena en el suroeste y centro de Florida, y se han anunciado cierres de escuelas en varios distritos costeros.
Bryan Norcross, especialista en huracanes de FOX Weather, advirtió que aunque aún es temprano para determinar el impacto exacto, el oeste de Florida debe estar en alerta máxima.
Los parques temáticos de Florida, como Walt Disney World y Universal Orlando, están monitoreando la situación, aunque no han anunciado cierres de momento. Mientras tanto, SeaWorld Orlando, Busch Gardens Tampa Bay y Legoland no han emitido declaraciones sobre el huracán.
La preparación y respuesta ante el huracán Milton es crucial para minimizar los daños y proteger a los residentes de Florida, quienes ya han experimentado los devastadores efectos de tormentas anteriores como el huracán Ian en 2022.
Marejadas ciclónicas
El impacto de Milton se espera que incluya marejadas ciclónicas peligrosas, vientos destructivos y lluvias intensas.
Marejadas ciclónicas son fenómenos naturales que ocurren durante tormentas tropicales o huracanes, cuando los vientos intensos empujan grandes volúmenes de agua hacia la costa, elevando significativamente el nivel del mar.
Este aumento repentino y anormal del agua puede superar los niveles normales de marea y provocar inundaciones masivas en áreas costeras. Las marejadas ciclónicas suelen ser impulsadas tanto por la velocidad del viento como por la baja presión atmosférica asociada a estas tormentas.
Su peligrosidad radica en la capacidad para causar inundaciones repentinas y devastadoras en zonas costeras bajas. Estas inundaciones pueden superar fácilmente las barreras costeras y penetrar tierra adentro, poniendo en riesgo la vida de las personas, los animales y causando daños severos a la infraestructura.
Además, el agua que arrastra puede contener escombros, aumentando el peligro de lesiones, ahogamientos y destrucción de propiedades.
Este fenómeno es una de las principales causas de mortalidad durante los huracanes. Aunque los sistemas de alerta temprana han mejorado considerablemente en las últimas décadas, las marejadas ciclónicas siguen representando una amenaza grave para las comunidades costeras, especialmente en aquellas áreas que carecen de medidas adecuadas de prevención y evacuación.
Durante el huracán Katrina en 2005, la marejada ciclónica tuvo un impacto catastrófico en la región del Golfo de México, especialmente en Nueva Orleans. A medida que el huracán se acercaba a la costa, los vientos huracanados y la presión baja provocaron un aumento dramático en el nivel del agua, publicó CNN.
Al menos 1,500 personas murieron directa o indirectamente debido al fenómeno, según el Centro Nacional de Huracanes.
infobae.com
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