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En el marco del XXX Encuentro de la Jurisdicción de lo Contencioso Administrativo, llevado a cabo en Villavicencio, la ministra Ángela Buitrago participó en una discusión crucial sobre los retos y perspectivas que plantea la inteligencia artificial (IA) en el ámbito judicial. Este evento, organizado por el Consejo de Estado, reunió a destacados juristas y académicos para debatir sobre el impacto de las nuevas tecnologías en la justicia, un tema que ha ganado relevancia en los últimos años.
Durante su intervención, la ministra Buitrago resaltó las ventajas que la inteligencia artificial ofrece para mejorar la eficiencia de los sistemas judiciales. “La inteligencia artificial permite a los sistemas judiciales globales analizar grandes volúmenes de datos jurídicos con una precisión y velocidad que antes no era posible”, afirmó. “Esto no solo optimiza los tiempos de respuesta, sino que también facilita la identificación de antecedentes jurisprudenciales y patrones que pueden pasar inadvertidos para el ojo humano, mejorando así la calidad de las decisiones judiciales”.
Sin embargo, la ministra también subrayó los desafíos éticos que acompañan a la implementación de estas tecnologías en el sector jurídico. “A pesar de los avances significativos, es crucial abordar las preocupaciones que surgen con el uso de la inteligencia artificial en la justicia. Hoy, enfrentamos cuestiones complejas como la responsabilidad de los sistemas de IA, la posibilidad de discriminación algorítmica y la falta de transparencia en algunos procesos automatizados”, advirtió. “Estas preocupaciones nos llevan a la necesidad urgente de integrar un enfoque ético en el desarrollo y aplicación de la inteligencia artificial en los sistemas judiciales”.
Buitrago destacó que la ética debe ser el eje central en la utilización de la inteligencia artificial en la justicia, insistiendo en que esta tecnología, aunque poderosa, debe ser manejada con cautela para evitar consecuencias negativas. “La inteligencia artificial no debe sustituir la sensibilidad humana ni el juicio crítico que solo un ser humano puede proporcionar. La tecnología es una herramienta valiosa, pero el papel del juez y del abogado sigue siendo insustituible en la interpretación y aplicación de la ley”, añadió.
En este sentido, la ministra hizo un llamado a fortalecer la formación de jueces, abogados y demás operadores judiciales en el uso de estas herramientas tecnológicas. “Es imprescindible que quienes administran justicia comprendan no solo el funcionamiento de la inteligencia artificial, sino también sus limitaciones y los riesgos que conlleva. Solo así podremos asegurar que estas tecnologías sean utilizadas de manera justa y equitativa”, señaló.
Finalmente, la ministra Ángela Buitrago concluyó su intervención enfatizando la necesidad de un marco regulatorio robusto que garantice la protección de los derechos fundamentales en el uso de la inteligencia artificial en la justicia. “Debemos trabajar en la construcción de normativas que acompañen el desarrollo tecnológico, asegurando que los avances en inteligencia artificial se alineen con los principios de justicia y equidad. Solo de esta manera podremos aprovechar los beneficios de estas herramientas sin comprometer los valores fundamentales de nuestra sociedad”, concluyó
carloscastaneda@prensamercosur.org
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