Harina, aceite, matalahúga, azúcar y vino dulce son los ingredientes de esta torta tradicional de los días del Corpus en Barcelona.
Un ‘panoli’ es aquel al que se le “engaña con facilidad por su simpleza”. Pero también es un delicioso dulce catalán que ha pasado desapercibido para muchos. La coca de panoli, también conocida simplemente como “panoli”, es una pequeña torta redondeada y azucarada, con variantes en su receta según la localidad.
Existen algunas controversias en torno al origen exacto de esta palabra. Algunas teorías apuntan a que ‘panoli’ procede de la palabra del catalán hablado en Valencia, ‘panoli’, con la que se designaba la ‘fruta de sartén’ y era una contracción de la palabra pa en oli, que, a su vez, deriva de la catalana pa amb oli, pan con aceite. La relación se hace prácticamente sola, ya que ciertamente no hay nada más simple que un trozo de pan en aceite.
Históricamente, el panoli se distribuía en diversas poblaciones de Les Terres de l’Ebre para recaudar fondos destinados a las fiestas mayores y las festividades de barrio. Ahora, esta pasta en forma de galleta, con una característica montañita en el centro de la misma, es típica de la fiesta del Corpus en Barcelona, que este año se celebra desde el jueves, 30 de mayo, hasta el domingo 2 de junio. En la Ciudad Condal, dicho dulce solo se podía conseguir en un momento y lugar específico: el domingo de Corpus, en la iglesia de la Concepción.
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Según informa Elnacional.cat, esta iglesia catalana encarga los panolis expresamente a un horno del barrio de la Dreta del Eixample, y los vende acompañados de un manojo de cerezas en el claustro de la parroquia, justo al lado de l’Ou com balla. Según cuenta el medio catalán, este año los clásicos panolis se repartirán gratuitamente en un acto en la calle: la Víspera de Corpus. El sábado 1 de junio, a las 19.45 h, los gigantes de la Ciudad, del Pi y de Santa Maria del Mar repartirán el dulce típico en la plaza del Rei, mientras se hace el baile de las figuras.
Los ingredientes de esta galleta catalana incluyen harina, aceite, matalahúga, azúcar y vino dulce, como el moscatel. La textura de la coca varía de blanda a crujiente según avanza el tiempo desde su elaboración. Una capa de mezcla de azúcar y canela se espolvorea sobre la coca antes de su consumo, una vez horneada. Se solía comer entre horas o para merendar, y en muchas poblaciones de Les Terres de l’Ebre está fuertemente asociada con las fiestas mayores.
La receta de este dulce catalán se encuentra recogida en el Institut Català de la Cuina i de la Cultura Gastronòmica, un paso a paso que consigue una adictiva galleta dulce con un sabor similar al de las rosquillas de vino de Navidad.
Receta de panolis
Ingredientes:
- ½ l de aceite de oliva
- 200 g de azúcar
- 50 g de matalahúva en grano
- ½ kg de harina
- 1 chupito de vino dulce
Elaboración:
- En un cuenco, añade el aceite, el azúcar y la matalahúva y revuélvelo bien. Añade el chupito de vino dulce y sigue removiendo.
- Cuando esté bien revuelto, añade la harina hasta que la pasta se pueda trabajar.
- Haz bolas de unos 100 g, aplasta primero, estíralas con los dedos y forma tontas de unos 12 cm de diámetro y 1,5 cm de espesor, aproximadamente.
- Finalmente, con un pellizco, haz una pequeña montañita en medio. Cúbrelas con una capa fina de azúcar.
- Colócalas en una bandeja de horno y cuece poco a poco a 120º de temperatura.
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