“La reiterada agresión de Azerbaiyán contra el territorio soberano de la República de Armenia y ataques militares contra el pueblo Nagorno-Karabaj perturba significativamente la paz y la estabilidad en nuestra región, viola masivamente los derechos humanos y el derecho humanitario representan una amenaza existencial para los armenios” ha comenzado explicando Mirzoyan.
Ante estos ataques ha relatado que su Gobierno “tiene la convicción y la aspiración sincera de establecer la paz y la estabilidad” en la región, pero que “por desgracia, no tenemos un socio para la paz sino un país que declara abiertamente que ‘el poder tiene el derecho’ y utiliza constantemente fuerza para perturbar el proceso de paz”.
“El mensaje –de Azerbaiyán– es claro: tú puedes hablar de paz y nosotros podemos ir a la guerra y tú no serás capaz de cambiar nada” ha denunciado el representante, que ha recordado que “esta atroz ofensiva a gran escala” ya se ha cobrado más de 200 de vidas, incluidas mujeres y niños, y el destino de otros cientos es incierto.
EL MINISTRO PIDE MEDIDAS CONCRETAS PARA ACABAR CON EL CONFLICTO
Por esta razón ha pedido que se tomen medidas concretas para acabar con el conflicto: “La cronología de acontecimientos verdaderamente devastadores en nuestra región viene a demostrar que los problemas no pueden abordarse simplemente con declaraciones y llamados genéricos”.
Entre sus solicitudes están la del envío de una misión interinstitucional de evaluación de necesidades y de investigación de la ONU a la región, ya que no han logrado acudir al rescate de personas “durante los últimos 9 meses. 285 días”.
A raíz de esto, ha denunciado “el uso del hambre como método de guerra, privando a la gente de sus medios de subsistencia, obstruyendo y denegando el acceso humanitario de las agencias de la ONU y obstaculizando al CICR actividades humanitarias, lo que constituyen señales tempranas de alerta de un crimen atroz.”
Para apoyar sus argumentos ha recordado que el Secretario General para la Prevención del Genocidio ya ha caracterizado la situación como “riesgo de genocidio”.
“Tenemos la esperanza de que la comunidad internacional, concretamente la ONU, demuestre una firme voluntad política para condenar la reanudación de las hostilidades y los ataques contra asentamientos civiles e infraestructuras y exigir el pleno cumplimiento de las obligaciones derivadas del acuerdo internacional de derechos humanos, incluidos los relacionados con la protección de los civiles, en particular mujeres y niños, y de la infraestructura civil crítica”, ha explicado.
“AZERBAIYÁN TIENE UNA AGENDA OCULTA”
Según el ministro, “la política de limpieza étnica contra Nagorno-Karabaj es sólo una parte de un panorama más amplio. En este sentido vemos claramente la intención de involucrar a la República de Armenia en acciones militares mediante el crecimiento de las hostilidades hacia nuestros territorios soberanos”.
“Azerbaiyán tiene una agenda oculta a la hora de desbloquear el transporte regional y las comunicaciones económicas. Como país sin litoral, Armenia tiene un interés vital en la aplicación del acuerdo sobre el desbloqueo de todas las comunicaciones regionales sobre la base de la soberanía, la jurisdicción nacional, la igualdad y la reciprocidad” ha explicado.
Ha criticado el corredor humanitario que quiere crear Azerbaiyán, al considerar que es una estrategia para “socavar la soberanía” territorial de Armenia, ya que cruzaría su país, pero no tendrían ningún control del mismo. “Esto es inaceptable para nosotros y debería ser inaceptable para la comunidad internacional”
Fuente de esta noticias es del Diario Publimetro Argentina: Leer más