Las 151 ambulancias que había prometido la Secretaría de Salud en Bogotá, resultaron siendo 105
El Espectador
En marzo del 2022 se anunció, por los medios de comunicación de la Alcaldía Mayor de Bogotá, la compra de 151 ambulancias que llegarían a “renovar” la flota de ambulancias de la Red Salud capitalina. Se trató de 151 camiones Isuzu NHR y Chevrolet NHR, y otros dos modelos 4×4, adquiridos por un valor aproximado de 36.000 millones de pesos que serían adecuados y distribuidos en las 4 subredes para la atención APH (Atención Pre Hospitalaria).
En un debate de control político sobre el sector salud del distrito, en cabeza de la Secretaría de Salud, realizado el pasado 10 de diciembre, la concejala del Centro Democrático, Diana Diago, adelantó una ponencia en la que denunciaba una serie de irregularidades en todo el proceso de adquisición de estos vehículos. En principio, afirma Diago, los contratos se sustentaron en una versión desactualizada de la Norma 3729 del ICONTEC, del año 2007, cuando ya está vigente una versión actualizada que entró en vigencia en el año 2018.
La normativa vigente (NTC 3729 Quinta Actualización) tiene importantes diferencias en donde se especifican unos requerimientos con los que deben contar las ambulancias para ser aptas funcionar como tal: la circulación del aire, la suspensión, entre otros. Además, incluso en la normativa desactualizada del 2007 se especifica la necesidad de que las ambulancias tengan airbags en caso de accidentes (de los que carecerían, según denuncias de los operarios); y la posibilidad de comunicación visual y auditiva “de acceso directo” entre camilleros y conductores de las ambulancias (que no existe en las ambulancias tipo furgones al tratarse de cabinas separadas).
NTC 3729 (2008)
En las órdenes de compra del SECOP 79231, 76526, 78606, 78605, todas a nombre de la empresa ALFA AM SAS, figuran precios unitarios de los vehículos desde los 180 hasta los 280 millones de pesos. Este contratista solicitó varias prórrogas durante la ejecución del contrato, continúa la concejala Diago en su ponencia del 10 de diciembre, y aunque la fecha de entrega estipulada era el 15 de noviembre de 2022, a fecha del 25 de noviembre habían sido entregadas apenas 105. Según nos informó una fuente de la Secretaría de Salud ya no se hará efectiva la compra de las 46 ambulancias faltantes.
Orden de Compra 79231 Colombia Compra Eficiente
Al consultar los precios de mercado, el valor comercial de los vehículos Chevrolet NHR, último modelo, ronda los 110 millones de pesos, sin contar todas las adecuaciones necesarias para convertirlos en ambulancias. Llama la atención que el valor unitario de los vehículos supere los 200 millones en casi todas las órdenes de compra disponibles en el SECOP, es decir que aparentemente costaría más la adecuación que el mismo vehículo.
¿Qué dicen los operarios?
Entre los testimonios reunidos por la concejala Diago y su equipo de investigación se mencionan toda clase de problemas que presentan, recién introducidas, las nuevas ambulancias: Filtraciones de agua en la cabina médica, riesgo de volcamiento y la deficiente capacidad de las baterías, entre otros. “En realidad es un camión, se forza mucho el carro, tiene mayor posibilidad de accidentalidad. Se han volcado ya tres carros de estos”, se escucha en uno de los audios presentados en el debate.
Equipo de Prensa Diana Diago
En una misiva dirigida a la Dirección de Urgencias de la Subred Centro Oriente por varios de los operarios de las nuevas ambulancias, se alerta sobre las deficientes condiciones de los vehículos y los instrumentos médicos incluidos en los mismos, que ponen en riesgo la calidad del servicio ofrecido, así como la vida de operarios y pacientes.
Camillas de baja calidad con ruedas delanteras fijas que dificultan los trayectos por los angostos corredores de las salas de urgencias; baterías deficientes que no soportan la cantidad de accesorios que se requieren para la prestación del servicio asistencial y obligan, a los operarios, a mantener las ambulancias encendidas para evitar que las baterías se descarguen; brechas en la carrocería por donde se filtra el agua a la cabina médica cuando llueve; una suspensión insuficiente que genera un constante movimiento en el área de paciente que puede generar dolor o mayores afectaciones a pacientes lesionados; y quizás lo más preocupante, la aducida imposibilidad de atender urgencias neonatales dada la incompatibilidad de las cabinas con las incubadoras, que deben permanecer fijas y aisladas durante el trayecto para no poner en riesgo la vida de los recién nacidos.
La respuesta del Secretario
“¿Qué pasó con esta compra?”, inicia el Secretario de Salud de Bogotá, Alejandro Gómez, con una relatoría del proceso de adquisición de las ambulancias. Según Gómez, en un principio se tenía presupuestado un monto de 35.000 millones para la adquisición de 128 ambulancias, sin embargo, a través de la plataforma Colombia Compra Eficiente, se logró acceder a un precio menor y, a su vez, ampliar el presupuesto a 36.000 millones de pesos para la adquisición de 151 ambulancias en total.
“Los vehículos que se adquieren para transporte asistencial (por medio de Colombia Compra Eficiente), en este caso ambulancias, deben estar homologadas en Colombia, y deben responder a la norma técnica colombiana. Estos vehículos son asignados o son adjudicados en la compra por Colombia Compra Eficiente.”, afirmó el Secretario, refiriéndose a las denuncias realizadas por la concejala Diago.
“Hubo 46 vehículos que él (el contratista) se comprometió a que fueran carros 4×4 y nos dio las certificaciones de que no los podía entregar porque no había lo que se conoce como el chasis 4×4”. Estas ambulancias restantes, continúa Gómez, tendrían un valor de 10.025 millones de pesos “que no se gastaron, que como hacían parte de recursos de crédito nunca se utilizaron como parte del cupo que tenía la ciudad de Bogotá para la reposición de estos carros”.
En cuanto a los accidentes que se han presentado con las nuevas ambulancias, Gómez afirmó que estos se debían, en gran parte, a que los choferes de las ambulancias incurren en excesos de velocidad. “No somos de su opinión, doctora Diago, de que las ambulancias deban ir muy rápido, esta es una conducta de riesgo” respondió.
“Uno no puede defender lo indefendible”, replicó la concejala Diana Diago al finalizar la intervención del Secretario de Salud. “Usted no dijo nada de la norma técnica, comprar unas ambulancias con una norma técnica que no estaba actualizada, usted tiene un deber de diligencia y las ambulancias no son ambulancias, son furgones.” Continuó Diago para finalizar afirmando, dirigiéndose al Secretario, que “nos veremos en otras instancias”. Diana Diago interpuso una demanda en fiscalía sobre las presuntas irregularidades en el proceso de compra de estas ambulancias a cuyo desarrollo haremos seguimiento.
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