El Rover Perseverance de la NASA lleva tiempo recolectando muestras de roca y suelo marcianos para su análisis, aquí en la Tierra. Pero para que ese análisis tenga lugar primero hay que traer las muestras hasta aquí. La NASA está probando el propulsor que hará eso posible.
Ese propulsor es un cohete con combustible sólido que irá instalado en el Vehículo de Ascensión Marciano (Mars Ascent Vehicle o MAV por sus siglas en inglés). La primera y segunda etapa de ese cohete acaba de probarse con éxito en el interior de una cámara de vacío a bajas temperaturas que simula las condiciones de despegue a las que se enfrentará cuando tenga que subir a órbita desde Marte.
“Esta prueba demuestra que nuestra nación tiene la capacidad de desarrollar un vehículo de lanzamiento que puede ser lo suficientemente liviano como para llegar a Marte, y a la vez lo suficientemente robusto como para poner en órbita un conjunto de muestras y traerlas de vuelta a la Tierra”, declaró Benjamin Davis, gerente de propulsión MAV del Marshall Space Flight Center, en un comunicado de la NASA. “La prueba de hardware nos dice que nuestra tecnología está lista para continuar con el desarrollo”.
La misión MAV es una de las más complejas jamás realizadas por la NASA. Incluye una nave en órbita que deberá poner un módulo de aterrizaje sobre Marte, varios helicópteros, y el primer cohete que despegará desde otro planeta. Ese cohete de combustible sólido tiene dos fases: SRM1 y SRM2, la primera fase está diseñada para sacar la nave MAV de la superficie de Marte, mientras que la segunda impulsará la carga con las muestras hacia otra nave en órbita, la Earth Return Orbiter, que se encargará de su transporte de vuelta a la Tierra.
Las pruebas de estas dos fases en las mismas condiciones que encontrarán durante su viaje son necesarias porque permiten a los ingenieros de la NASA realizar los ajustes finos necesarios. LA SRM1 se colocó en una cámara de vacío con temperaturas de -4 grados Fahrenheit (-20 grados Celsius) para simular las condiciones en Marte.
Para que el motor del cohete sobreviviera al frío extremo, el equipo tuvo que equiparlo con una tobera de bola atrapada con una línea dividida supersónica en lugar de una toberade motor de cohete sólido normal, que no está diseñada para el clima marciano. Las toberas son tubos de forma especial a través de los cuales fluyen los gases calientes y se utilizan como parte de los motores de los cohetes para producir empuje al acelerar los gases de escape calientes.
Durante la prueba, la tobera supersónica de línea dividida alcanzó el sexto de nueve niveles de preparación tecnológica según una escala desarrollada por la NASA. El nuevo diseño de la tobera aún se someterá a más pruebas para “asegurarse de que pueda manejar el intenso temblor y la vibración del lanzamiento, el casi vacío del espacio y el calor y el frío extremos que se esperan durante el viaje de MAV”, explicó la NASA.
Se espera que la misión traiga las muestras a comienzos de la década de 2030, pero podría haber retrasos por los problemas de gestión y presupuestarios a los que la NASA se enfrenta últimamente. Hasta hay un subcomité del Senado de Estados Unidos que ha solicitado su cancelación a menos que pueda ajustar su presupuesto.
Gizmodo
- TravelgateX irrumpe en Latinoamérica con una propuesta de valor innovadora - 18 de julio de 2024
- INCOMUNICADOS: El Gobierno de Milei dió rienda suelta a los aumentos en internet, cable y celular. - 27 de junio de 2024
- Por qué las fuertes nevadas y lluvias podrían contribuir a generar terremotos, según expertos del MIT - 10 de mayo de 2024