La elección en Córdoba dejó un revés para las expectativas opositoras y una tímida foto de unidad en JxC.
El peronismo de Juan Schiaretti volvió a ganar la intendencia de la capital y le sacó 8 puntos de diferencia al radical Rodrigo De Loredo. Pese a la derrota, Rodríguez Larreta y Bullrich viajaron y volvieron a compartir escenario. La atención opositora pasa a Chubut, que elige gobernador el domingo.
La ciudad de Córdoba eligió este domingo a su intendente y, así, pasó la anteúltima elección local de peso antes de las PASO nacionales. La votación cordobesa dejó esta vez un golpe para las expectativas de JxC. El candidato del peronismo schiarettista le ganó por casi 8 puntos al radical Rodrigo De Loredo. Los comicios cordobeses propiciaron, por otra parte, una tímida foto de unidad opositora, que traslada su ilusión ahora en Chubut, pero también un dato que podría incidir en la interna el 13 de agosto y que en los equipos de campaña ya empezaron analizar: la baja de la participación.
Alrededor de 1.130.000 cordobeses estaban habilitados a votar. Esto es, aproximadamente el 40% de la población cordobesa, y una masa electoral digna de una provincia. Es decir, para empezar desde una perspectiva numérica la elección de este domingo era importante para la coalición opositora de entrada por la cantidad de votantes.
Es la misma razón por la que, en estas últimas tres semanas de campaña, Horacio Rodríguez Larreta y Patricia Bulrrich concentrarán sus recorridas y actividades en los distritos más poblados del país, fundamentalmente en Buenos Aires y, sobre todo, en el conurbano bonaerense.
A diferencia de Santa Fe -donde celebró el larretismo- en Córdoba no había forma de que uno de los presidenciables de Juntos por el Cambio pudiera llevarse el rédito político si existía un triunfo. De Loredo forma parte de Evolución, que es el sector de la UCR que comanda el senador Martín Lousteau. Pero se mostró y recibió apoyo tanto de Larreta, como de Bullrich, y especialmente de Mauricio Macri, cuya figura sigue pesando en suelo cordobés.
Ambas fórmulas presidenciales viajaron a la provincia. Larreta estuvo con el presidente de la UCR, Gerardo Morales, y Bullrich con el también radical Luis Petri. Los cuatro subieron al escenario y se pusieron a su lado, cuando De Loredo reconoció -antes de que se conocieran los datos oficiales- que había sido derrotado y que el peronista Daniel Passerini (Hacemos Unidos por Córdoba) sería el nuevo intendente de la capital. El peronismo de Juan Schiaretti -que irá por la presidencia- revalidó su fortaleza provincial.
“Agradecido inmensamente de estos dirigentes de Juntos por el Cambio que vinieron a Córdoba con mucha responsabilidad. Los hice venir al pedo, digo yo, pero bueno”, bromeó, mientras los referentes nacionales negaban con la cabeza. De hecho, el cordobés logró lo que solo había logrado antes una crisis institucional.
Desde el inicio de la campaña electoral a fines de junio no hubo foto de unidad. La última vez que Bullrich y Larreta se mostraron juntos fue antes del cierre de listas de candidatos, el 20 de junio pasado, cuando los jefes opositores de todos los sectores que integran JxC, se juntaron para darle apoyo a Morales en medio de las fuertes protestas en Jujuy por la reforma constitucional. De hecho, aquella vez no estaba Luis Petri, que todavía no había sido definido como candidato a vice.
Entonces, pese a la derrota, la elección cordobesa permitió una foto de “unidad”. En el bullrichismo descartaron que se trate de una foto de “tregua”, pero al menos fue una muestra de “convivencia” interna. Algunos en el equipo de campaña de la exministra de Seguridad preferían haber evitado una imagen que, entienden, “les resta” camino al 13 de agosto.
Por otra parte, hubo anoche algunos roces fuertes en la interna opositora y cordobesa: a Ramón Mestre, el presidente de la UCR local, exintendente de la capital y uno de los referentes de campaña de Morales, no habría sido invitado a subir al escenario y se habría retirado furioso de búnker opositor, con De Loredo y Juez.
Pese a que ya tenían decidido viajar a la provincia independientemente del resultado, los referentes de JxC esperaban llegar a las PASO nacionales sin cortar con la seguidilla de triunfos conseguidos en provincias gobernadas por el peronismo, como San Luis, San Juan, Chaco y Santa Fe, aunque estas dos últimas fueron PASO. La derrota de este domingo supuso algo de frustración, sobre todo porque las encuestas daban un escenario mucho más peleado con el oficialismo local que el que terminó mostrando los resultados.
Ahora, la atención opositora pasa a Chubut, donde el próximo domingo se realizarán la última elección a gobernador antes de las elecciones nacionales del 13 de agosto. Juntos por el Cambio lleva como candidato al senador del PRO Ignacio “Nacho” Torres, que -aunque más cercano a Larreta- mantiene equilibrio frente a la interna presidencial y tiene el respaldo de Macri. Podría, tal vez, dejar una foto de “civilidad” más entre el jefe de Gobierno porteño y la exministra de Seguridad nacional.
Las encuestas, también en el caso de Chubut, generan optimismo para el frente opositor respecto a sus posibilidades de vencer al peronismo local. ¿Pero qué falló en las encuestas este domingo en Córdoba? El propio De Loredo ensayó una explicación sobre el escenario, cuando ya se sabía derrotado: la baja participación. En las elecciones de ayer votó el 60% de los electores habilitados. Fue especialmente baja: el promedio de la última veintena de elecciones provinciales es de alrededor del 72%, que también supone una caída respecto del 2019.
En JxC tomaron nota del dato, aunque con distintos grados de preocupación. En el entorno de Bullrich entienden que, si la baja de participación se replicara en la elección nacional, no la perjudicaría en la pelea interna con Larreta. Entienden que el electorado duro de JxC es un votante enojado con el gobierno y con ganas de ir al cuarto oscuro. “El problema es para el que necesita el voto moderado en una PASO”, deslizan en la mesa chica de la exministra.
Dos de los dirigentes más cercanos a Rodríguez Larreta advierten que no está claro que la baja participación pueda inclinar la balanza de la interna para el lado de los halcones, como supuestamente lo habría demostrado Santa Fe, pero que sí podría traer problemas para derrotar a Unión por la Patria y Sergio Massa: “Históricamente, se sabe que el kirchnerismo cuenta con capacidad de mover ‘aparato’, mientras que el grueso de nuestro voto es individual y no movilizado. El que es de aparato vota sí o sí, por eso es importante que todos vayan a votar”, alertan.
- La nieta de Elvis Presley presentó una demanda para paralizar la subasta de la mansión Graceland - 21 de mayo de 2024
- Abinader insta a gran pacto nacional en República Dominicana - 21 de mayo de 2024
- Asamblea General reconoce mayor participación de Palestina en la ONU - 10 de mayo de 2024
Publicaciones relacionadas:
- Argentinos en Paraguay: dónde votar, padrón electoral y cómo justificar la no emisión del voto
- Milei dijo que no iba a negociar con comunistas, hasta que llegó carta de Xi Jinping
- Brindaron herramientas para mejorar el abordaje de intervención en los casos de abusos sexual contra niñas y adolescentes
- “Hoy más que nunca, nunca más”: Masiva marcha por la memoria y la justicia y contra el negacionismo