
A la vista de la asunción del nuevo gobierno y nuevo escenario político; corren múltiples denuncias, informaciones e investigaciones que ratifican más allá de toda duda razonable lo que se olía: la fracasada franquicia del Socialismo del S. XXI degeneró en múltiples organizaciones criminales destinadas a saquear al estado sobre el que tanto phajpakearon y, con ello, estafar agravadamente al “pueblo”, al ciudadano, a sus “hermanos”, etc. Bien decía algún analista, donde se está poniendo el dedo está saltando pus en cantidades industriales.
Leo en las RRSS incluyendo a grupos de Abogados u otros grupos de profesionales, todos ciudadanos; su esperanza y frecuentemente (lo que me preocupa y discrepo) deseos primarios de venganza por la enorme magnitud del daño perpetrado a nuestro futuro: saquearon a manos llenas los millones de dólares que por el boom de los precios de las materias primas -eso de la nacionalización, fue otra estrategia envolvente- y otros factores, fluyeron hacia las arcas bolivianas, dejándolas como ahora ocurre y el Presidente nos lo recuerda cotidianamente, completamente exangües.Aquel discursito de la revolución, quedó en burda “robolución”. Ahora, hay que reconstruir el país, pues lo que bajo ese pretexto “revolucionario” nos charlaron, quedó exprimido y expoliado por sus mal administradores. Las evidencias saltan a la vista y cursan en todos los órdenes.
Así el estado del arte, la débil institucionalidad boliviana -ojalá también en urgente proceso de reconstrucción- enfrenta un colosal desafío, principalmente en el ámbito de la administración de justicia que no solamente incluye a lo estrictamente jurisdiccional (Tribunales + Ministerio Público) sino a todos los organismos (CGE; PGE; Policía Nacional; DP, etc) que intervienen en ese sistema según sus atribuciones y competencias.
Y entonces, no se trata de repetir las iniquidades que el apeado régimen perpetró contra quienes identificaba como a sus “enemigos” vulnerándoles so pretexto de hacer justicia todo su elenco de derechos y garantías de manera sistemática hasta extremos grotescos de haberlos prácticamente asesinado (Bakovic, Aramayo y otros menos famosos, incluyendo a quienes les arruinó sus vidas en todos los planos) con la entusiasta, servil y asquerosa actuación y/o encubrimiento de juristas del horror -ahora también en su pleno proceso de cambio- sino simple y llanamente de garantizarles la madre de todas las garantías: el Debido Proceso, tanto adjetivo como substantivo, de forma que las necesarias investigaciones y procesos que esa institucionalidad debe garantizar a absolutamente TODO ser humano, sin importar ninguna condición, pensamiento o lo que sea.
No se trata de venganza entonces o de algo peor como hizo el saliente régimen, sino de impartir justicia: “Dar a cada uno lo suyo”, diría el viejo ULPIANO. Garantista con sentencia ejecutoriada como soy, me declaro asombrado por las exigencias de muchos, varios sensiblemente colegas del foro, que lo único que propugnan es una primaria para no decir cavernaria venganza; exigiendo por ejemplo detenciones a ultranza, alertas migratorias (que no son legales y peor constitucionales, por si acaso) u otras medidas restrictivas, sin necesariamente mediar ese fabuloso instituto jurídico propio de un genuino estado democrático sujeto al imperio del Derecho, lo que implica -mala noticia para los autoritarios- que esos urgentes y justos procedimientos de investigación y juzgamiento que deben necesariamente realizarse ante el desastre causado, debe también observar puntillosamente el Debido Proceso. De lo contrario, simplemente repetiremos sine die los abusos de unos contra otros, dependiendo solamente de quienes estén o no cerca al poder. Pésimo negocio.
Ese instituto, les guste o no a quienes perversamente postulan o entienden la impartición de justicia como un burdo sistema de venganzas, lealtades, volteos y otros desvíos de poder; constituye para un genuino estado sujeto al imperio del Derecho la única manera de hacer justicia y en suma, otorgar legitimidad al juzgamiento de cualquier persona, incluyendo al hampa que so pretexto de revolución saqueó al estado y a sus “hermanos” a los que engañaron maliciosamente para sus fines particulares. No se trata entonces de repetir los abusos que hace 5 minutos se criticaban desde el otro bando.
Esa es la magnitud del tremendo desafío que ahora le toca a la muy débil institucionalidad boliviana puesta precisamente en esa situación por quienes ahora están en el otro lado de la balanza, incluyendo a muchos de los que hicieron de verdugos o servilmente se prostituyeron ante ellos. Urge aplicar el Debido Proceso para lograr lo importante: hacer justicia. “No es el desafío lo que define quienes somos ni qué somos capaces de ser, sino cómo afrontamos ese desafío: podemos prender fuego a las ruinas o construir un camino, a través de ellas, paso a paso, hacia la libertad”. Richard BACH
por: Arturo Yañez Cortes
Publicado por: La Voz de Tarija
Fuente de esta noticia: https://lavozdetarija.com/2025/12/08/urgencia-del-debido-proceso-para-lograr-lo-importante-justicia/
También estamos en Telegram como @prensamercosur, únete aquí: https://t.me/prensamercosur Mercosur
Recibe información al instante en tu celular. Únete al Canal del Diario Prensa Mercosur en WhatsApp a través del siguiente link: https://www.whatsapp.com/channel/0029VaNRx00ATRSnVrqEHu1W
