Imagen Alcaldía Kennedy
En la noche y madrugada del 6 de diciembre, la localidad de Kennedy fue escenario de un amplio operativo de control que dejó en evidencia la presión institucional que continúa ejerciéndose sobre las zonas con mayor actividad nocturna de Bogotá. La alcaldesa local, Karla Marín, encabezó personalmente la intervención, acompañada por unidades de la Policía Metropolitana, para verificar el cumplimiento de las normas y garantizar condiciones seguras para residentes y visitantes. Su presencia reafirmó el compromiso de la administración local con una vigilancia constante y con la aplicación rigurosa de las disposiciones vigentes.
Durante el recorrido por los bares ubicados en la Avenida Primero de Mayo, las autoridades llevaron a cabo procedimientos de Inspección, Vigilancia y Control que derivaron en la suspensión temporal de la actividad económica de dos establecimientos, conforme a lo estipulado en la Ley 1801 de 2016. La medida fue adoptada tras identificar irregularidades que comprometían la seguridad de los asistentes y el cumplimiento de los requisitos exigidos para el funcionamiento nocturno.
El operativo también permitió la identificación de cuatro menores de edad que se encontraban dentro de los establecimientos inspeccionados. Tras las verificaciones correspondientes, los jóvenes fueron entregados a sus familiares, reforzando así el mensaje de tolerancia cero frente a la presencia de menores en espacios no permitidos. Paralelamente, se incautaron 83 dosis de estupefacientes y dos armas blancas, evidencia de que la intervención no solo apuntó al control administrativo, sino también a la mitigación de factores de riesgo que afectan la convivencia y el orden público.
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La alcaldesa Marín destacó la importancia de estos operativos, desarrollados de manera constante y estratégica, y subrayó que los resultados reafirman la necesidad de mantener una presencia institucional activa durante las horas de mayor concentración de actividades comerciales y recreativas. La jornada, que se extendió hasta la madrugada, dejó una sensación de respaldo entre los vecinos y comerciantes que valoran la actuación decidida de las autoridades para recuperar la tranquilidad en uno de los sectores más dinámicos y concurridos de la localidad.
Este tipo de intervenciones seguirá haciéndose de manera articulada entre la Alcaldía Local y la Policía, con el propósito de consolidar entornos seguros, promover el cumplimiento de la ley y enviar un mensaje claro: en Kennedy, el orden y la seguridad son una prioridad permanente.
carloscastaneda@prensamercosur.org
