
Más de 8,6 millones de brasileños superaron el umbral de la pobreza en 2024. Este logro socioeconómico redujo la proporción de la población en situación de pobreza del 27,3% en 2023 al 23,1%. Este es el nivel más bajo registrado desde 2012, cuando el Instituto Brasileño de Geografía y Estadística (IBGE) comenzó su serie histórica.

En 2024, Brasil contaba con 48,9 millones de personas viviendo con menos de US$ 6,85 al día, aproximadamente R$ 694 al año, según valores ajustados. Este es el umbral de pobreza definido por el Banco Mundial. En 2023, 57,6 millones de brasileños vivían en la pobreza.
Los datos son parte del estudio Síntesis de Indicadores Sociales, publicada este miércoles (3).
Los indicadores reflejan el tercer año consecutivo de disminución en el número y la proporción de personas pobres, señalando una recuperación después de la pandemia de covid-19, que comenzó en 2020.
Vea el comportamiento de la pobreza en el país:
- 2012: 68,4 millones
- 2019: 67,5 millones (último año antes de la pandemia)
- 2020: 64,7 millones
- 2021: 77 millones
- 2022: 66,4 millones
- 2023: 57,6 millones
- 2024: 48,9 millones
En 2012, la proporción de personas por debajo del umbral de pobreza era del 34,7%. En 2019, esta cifra alcanzó el 32,6%. En el primer año de la pandemia (2020), se redujo al 31,1% y llegó al punto más alto de la serie en 2021, con un 36,8%. Desde entonces, ha mostrado una tendencia a la baja, pasando del 31,6% en 2022 al 23,1% el año pasado.
Trabajo y transferencia de renta
El investigador del IBGE André Geraldo de Moraes Simões, responsable del estudio, explica que en 2020, durante el estallido de la pandemia, la pobreza incluso disminuyó debido a los programas de asistencia de emergencia, como el Auxílio Emergencial proporcionado por el gobierno federal.
«Estas ayudas regresaron en abril de 2021, pero con importes más bajos y un acceso más restringido al público, y dado que el mercado laboral seguía frágil, la pobreza aumentó», afirma.
Simões agrega que, a partir de 2022, el mercado laboral comenzó a reactivarse, junto con programas de asistencia con importes más altos, lo que contribuyó al progreso socioeconómico.
«Tanto el mercado laboral en recuperación como los beneficios de transferencia de renta, especialmente Bolsa Família y el Auxílio Brasil, que aumentaron sus valores y expandieron el grupo de beneficiarios», señala.
En el segundo semestre de 2022, el programa Auxílio Brasil comenzó a pagar R$ 600. En 2023, el programa fue renombrado como Bolsa Família.
Pobreza extrema
En el último año, Brasil también ha experimentado una disminución de la pobreza extrema, que se refiere a aquellas personas que viven con un ingreso de hasta US$ 2,15 dólares, aproximadamente R$ 218 mensuales a precios del año pasado.
De 2023 a 2024, este grupo se redujo de 9,3 millones a 7,4 millones, es decir, 1,9 millones de personas menos. Esto significó que la proporción de la población en extrema pobreza disminuyó del 4,4% al 3,5%, la más baja jamás registrada.
En 2012, cuando comenzó la serie histórica, la tasa era del 6,6%. En 2021, alcanzó el 9% (18,9 millones de personas).
Desigualdad regional
Las cifras del IBGE evidencian la desigualdad regional. En las regiones Norte y Nordeste, tanto la pobreza como la extrema pobreza superan la media nacional.
Pobreza
- Nordeste: 39,4
- Norte: 35,9
- Brasil: 23,1
- Sureste: 15,6
- Centro-Oeste: 15,4
- Sur: 11,2
Pobreza extrema
- Nordeste: 6,5
- Norte: 4,6
- Brasil: 3,5
- Sureste: 2,3
- Centro-Oeste: 1,6
- Sur: 1,5
«Estas son las regiones más vulnerables del país, lo cual también se refleja en el mercado laboral», afirma André Simões.
Otra desigualdad evidenciada es la racial. Entre la población blanca, el 15,1% vivía en pobreza, mientras que el 2,2% estaba en pobreza extrema.
En la población negra, la pobreza afectaba al 25,8% y la pobreza extrema al 3,9%. Entre las personas morenas, los porcentajes eran del 29,8% y el 4,5%, respectivamente.
El Gini más bajo desde 2012
La Síntesis de Indicadores Sociales actualizó el Índice de Gini, que mide la desigualdad de ingresos. El índice varía entre 0 y 1: cuanto más alto es, mayor es la desigualdad.
En 2024, el Índice de Gini alcanzó 0,504, el valor más bajo desde el inicio de la serie en 2012. En 2023, fue de 0,517.
Para evaluar el impacto de los programas sociales en la reducción de la desigualdad, el IBGE presentó un cálculo del Gini sin considerar esta política de bienestar.
El estudio encontró que el indicador sería de 0,542 si no existieran programas de transferencia de renta, como Bolsa Família y el Beneficio de Prestación Continuada (BPC, que es un salario mínimo mensual para personas mayores de 65 años o con discapacidad de cualquier edad).
Otro ejercicio hipotético realizado por los investigadores evaluó la situación de las personas de 60 años o más si no existieran prestaciones de la seguridad social.
La pobreza extrema entre las personas mayores aumentaría del 1,9% al 35,4%, según las previsiones del instituto. La pobreza general subiría del 8,3% al 52,3%.
El sondeo también revela que la pobreza es más alta entre los trabajadores informales. Entre los empleados sin contrato formal, afecta a uno de cada cinco (20,4%). Para los empleados con contrato formal, la proporción es del 6,7%.
Fuente de esta noticia: https://agenciabrasil.ebc.com.br/es/economia/noticia/2025-12/mas-de-86-millones-de-brasilenos-superan-umbral-de-la-pobreza
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