
El Vaticano corrigió un comunicado inicial que afirmaba que el pontífice había rezado durante el recorrido
El papa León XIV realizó este sábado un recorrido por la Mezquita Azul de Estambul, uno de los templos más emblemáticos del periodo otomano. El pontífice, acompañado por líderes musulmanes de la ciudad, ingresó al lugar después de descalzarse en señal de respeto, aunque no participó en ningún acto litúrgico durante la visita.
La presencia del papa en el recinto generó expectativas, especialmente porque sus predecesores habían realizado breves momentos de recogimiento durante visitas similares. Sin embargo, autoridades del templo detallaron que, aunque se le ofreció un espacio para orar, León XIV declinó la invitación y prefirió limitarse a recorrer el interior del edificio. La escena llamó la atención por su informalidad, ya que el pontífice caminó por el suelo de la mezquita con sus característicos calcetines blancos.
El Vaticano destacó que el propósito de la visita era fortalecer el espíritu de diálogo con el mundo musulmán, una línea que la Iglesia católica ha promovido constantemente en las últimas décadas. La presencia del pontífice en la Mezquita Azul se inscribe en la tradición de encuentros interreligiosos que han buscado construir puentes entre ambas comunidades de fe.
Más tarde ese mismo día, León XIV sostuvo reuniones con representantes de diversas iglesias cristianas locales y participó en un servicio religioso en la Iglesia Patriarcal de San Jorge. Estos encuentros forman parte de una agenda que busca reforzar las relaciones entre distintas confesiones y subraya el compromiso del papa con la cooperación y la unidad entre religiones.
