Rumer Willis, primogénita de Bruce Willis y Demi Moore, ha compartido una actualización íntima sobre la salud de su padre, afectado por demencia frontotemporal. La actriz explica que en algunas visitas su progenitor ya no siempre la identifica, un efecto doloroso del avance de la enfermedad que convive con una conexión emocional que no se apaga.
En sus mensajes, Rumer describe que todavía percibe una chispa de reconocimiento afectivo cuando lo abraza y pasa tiempo con él. Asegura sentirse profundamente agradecida por poder seguir viéndolo y por esa respuesta emocional compartida que, a su juicio, trasciende las limitaciones del deterioro cognitivo.
El estado actual del actor
Retirado de la actuación en 2022 por el empeoramiento de su salud, Bruce Willis vive ahora en una vivienda independiente de una sola planta, adaptada y con un equipo de atención permanente las 24 horas, los 7 días. Ese entorno busca minimizar riesgos y ofrecerle una rutina más predecible y segura.
En una de sus contadas apariciones recientes, se le pudo ver acompañado por un cuidador, tomado de la mano y apoyándose en una barandilla para mantener el equilibrio. La escena ilustra la fragilidad física y la dependencia que impone el progreso de la DFT.
Qué es la demencia frontotemporal (DFT)
La familia ha explicado que el diagnóstico de demencia frontotemporal se confirmó públicamente en 2023. Esta patología se caracteriza por cambios profundos y rápidos en la personalidad, el comportamiento y el lenguaje, a diferencia del Alzheimer, en el que la memoria suele verse afectada en etapas más tempranas.
De acuerdo con entidades especializadas como la Asociación para la Degeneración Frontotemporal, la DFT es una causa destacada de demencia en personas menores de 65 años y no dispone de cura ni de tratamientos capaces de frenarla. Rumer, con realismo, sostiene que la evolución no ofrece mejoras sostenidas, aunque su padre se mantiene lo mejor posible dentro del cuadro clínico.
Cómo lo vive la familia
Emma Heming Willis, esposa del actor, ha contado que la decisión de mudarlo a un espacio independiente fue difícil pero necesaria para garantizar su bienestar y preservar, en lo posible, el equilibrio emocional de todos. En una entrevista televisiva reciente, resumió que ese cambio le permitió volver a ejercer ante todo su papel de esposa, no solo de cuidadora.
Rumer acude con su hija Louetta, que se acerca a los dos años, para mantener viva la sensación de familia pese a las barreras de comunicación. Bruce comparte con Demi Moore a sus hijas adultas Rumer, Scout y Tallulah, y con Emma a Mabel (13) y Evelyn (11), quienes atraviesan un duelo continuo; su madre ha descrito en prensa que extrañan mucho a su padre y que esta adaptación es particularmente compleja para las más pequeñas.
Cuidados y gestión
Además del plano emocional, la DFT exige una organización constante de recursos. Con un patrimonio estimado en alrededor de 250 millones de dólares, Willis ya no gestiona sus asuntos personales, y es Emma quien asume la administración económica y la toma de decisiones médicas diarias.
La familia apuesta por la transparencia para evitar la especulación mediática y fomentar la conciencia sobre la DFT. En ese marco, comparten publicaciones puntuales y recuerdan la carrera de Bruce en títulos icónicos como Die Hard, El Sexto Sentido, Armageddon y Pulp Fiction, mientras procuran rodearlo de afecto, música y compañía para preservar su calidad de vida.
Mientras la enfermedad avanza, el entorno de Willis y sus seguidores mantienen el apoyo y el reconocimiento a una figura que marcó a varias generaciones; para Rumer, cada visita sigue siendo la forma de cuidar una conexión que permanece incluso cuando las palabras se vuelven escasas.
Postposmo
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