

Imagen El Espectador
La nominación del presidente colombiano Gustavo Petro al Premio Right Livelihood 2026, conocido mundialmente como el Premio Nobel Alternativo, ha generado un amplio eco internacional, no solo como reconocimiento a su trayectoria política, sino como un reflejo del creciente protagonismo de Colombia en los debates globales sobre justicia ambiental, equidad social y transformación sostenible. Este galardón, creado en Suecia en 1980, honra a quienes impulsan soluciones reales y humanas frente a los desafíos más complejos del planeta: la crisis climática, las desigualdades sociales, la defensa de la vida, los derechos humanos y la paz.
La directora de la Unidad para las Víctimas, Lilia Solano, confirmó que la postulación de Petro proviene de diversas regiones del mundo, desde el sur global hasta Norteamérica y Europa, y representa el respaldo de organizaciones, académicos y movimientos sociales que reconocen en su discurso y acciones una apuesta por un modelo más justo, responsable y solidario entre las naciones. La nominación fue presentada oficialmente en Santa Marta por el profesor costarricense Henry Mora, quien destacó el papel de Petro como líder que entiende que la transición energética y la justicia climática no pueden desligarse de la justicia social.
Para los promotores de su candidatura, la figura del presidente colombiano encarna una visión que plantea con claridad que la crisis climática no es solo un problema ambiental, sino un desafío ético y político que requiere responsabilidad compartida, pero diferenciada, entre los países. Petro ha llevado ese mensaje a escenarios multilaterales de alto nivel, insistiendo en que no habrá sostenibilidad posible si no se transforman los sistemas económicos que perpetúan desigualdad y devastación ambiental.
El mandatario expresó su agradecimiento a través de sus redes sociales, subrayando el papel esencial de las organizaciones sociales colombianas, especialmente del colectivo Mujeres por la Paz, cuyo trabajo ha sido decisivo en los procesos de reconciliación territorial, defensa de los derechos y participación ciudadana. Destacó que ningún reconocimiento es posible sin el esfuerzo de quienes, desde los territorios, lideran luchas silenciosas por la dignidad, la inclusión y la justicia.
Esta nominación coloca nuevamente a Colombia en la agenda global como un referente de acción y reflexión en torno a la transición energética, la sostenibilidad y los derechos humanos. Refuerza, además, el papel del país como actor que propone alternativas frente a los modelos tradicionales de desarrollo y reivindica la voz del sur global en la construcción de soluciones planetarias.
Con este anuncio, Gustavo Petro ingresa oficialmente al selecto grupo de líderes internacionales considerados para recibir el Premio Right Livelihood en 2026. La ceremonia de entrega se realizará en Estocolmo y, aunque el veredicto final se conocerá el próximo año, la sola nominación ya representa un hito en la proyección internacional de la agenda colombiana. Es también un símbolo de que el mundo escucha, cada vez con mayor atención, las voces que abogan por un futuro más justo, solidario y sostenible para todos.
carloscastaneda@prensamercosur.org
