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En un movimiento que refleja la prioridad del Ejecutivo por fortalecer la cultura laboral en Colombia, el ministro de Trabajo, Antonio Sanguino, anunció la instalación de una mesa de diálogo con los directivos de la cadena Olímpica, una de las principales empresas del país. El objetivo, según explicó, es construir soluciones conjuntas que garanticen derechos y mejores condiciones para los trabajadores.
En el encuentro, Sanguino fue enfático al señalar que “el diálogo social y la conciliación son la esencia del Gobierno del Cambio y del Ministerio del Trabajo”. Con esta afirmación, el alto funcionario subrayó que la actual administración no concibe el avance laboral sin la participación activa de los diferentes actores: el Estado, las empresas y los trabajadores.
La reunión se dio tras la inspección nacional llevada a cabo el pasado 19 de agosto, cuyos hallazgos fueron puestos sobre la mesa en un ejercicio de transparencia. Dichos resultados, de acuerdo con el Ministerio, revelan la necesidad de implementar un plan integral que permita no solo corregir las situaciones identificadas, sino también consolidar entornos laborales dignos, sostenibles y acordes con los principios internacionales del trabajo decente.
El ministro aseguró que la apertura de este espacio constituye “el primer paso de un proceso que aspira a convertirse en un referente nacional de cómo, a través del diálogo y la concertación, se pueden transformar realidades y restablecer los derechos de los trabajadores en el marco de la justicia social”.
Para el Gobierno, este ejercicio de conciliación representa una oportunidad para demostrar que el crecimiento empresarial no está reñido con el bienestar laboral. Al contrario, la apuesta es construir un modelo donde la competitividad y el respeto por los trabajadores se conviertan en pilares complementarios.
El Ministerio del Trabajo reiteró que este proceso no se limitará a la revisión puntual de las condiciones actuales, sino que avanzará hacia un plan de mejoramiento integral con compromisos verificables, donde la empresa, los empleados y el Estado actúen como corresponsables.
Con este anuncio, el Ejecutivo envía un mensaje claro: la transformación laboral en Colombia no será producto de la imposición, sino del consenso. Y, en palabras de Sanguino, “el Gobierno del Cambio se construye escuchando, conciliando y garantizando que cada trabajador en el país pueda ejercer su labor con dignidad y justicia”.
carloscastaneda@prensamercosur.org
