

Audios filtrados revelan una presunta red de coimas en discapacidad e implican a Karina Milei y a Martín Menem. Este es solo uno de los varios escándalos que se pendulan sobre los Milei como una espada de Damocles.
El año 2025 ha estado marcado por una serie de contratiempos políticos y legislativos para el presidente de Argentina, Javier Milei, y su espacio, La Libertad Avanza (LLA). Estos eventos han configurado un escenario de debilitamiento gubernamental y una complejidad creciente para la aplicación de su programa de gobierno. La acumulación de estos reveses ha generado un panorama de fragilidad política para el oficialismo.
El entorno presidencial ha estado inmerso en investigaciones judiciales por presuntos actos de corrupción, erosionando la narrativa central de lucha contra el establishment político. Estos casos, sumados a las dificultades en el Congreso, han impactado en la imagen pública de la administración y en los índices de confianza medidos por diversas consultoras.
La combinación de factores ha derivado en una pérdida de capital político que se evidencia en las urnas y en la capacidad de maniobra dentro del Poder Legislativo. El año se caracteriza por una tensión constante entre el Ejecutivo y otros poderes del Estado, así como por una polarización social acentuada.
Derrotas políticas y parlamentarias en 2025: un año oscuro para los Milei
Durante los comicios legislativos provinciales de Buenos Aires, celebrados el 7 de septiembre, el partido oficialista experimentó una derrota significativa. La agrupación que lidera el presidente obtuvo un 34% de los votos, una cifra considerablemente inferior al 47% alcanzado por la fuerza peronista bajo la dirección de Axel Kicillof. Este resultado adquirió una dimensión nacional debido al peso demográfico y electoral de dicho distrito.
El propio Javier Milei reconoció el resultado como una «clara derrota» y anunció la realización de una autocrítica interna. No obstante, ratificó la decisión de mantener el rumbo económico establecido para su gestión. Analistas políticos interpretaron el veredicto de las urnas como un indicio de un desgaste de apoyo en un segmento clave del electorado.
Diversos factores influyeron en el resultado, entre ellos, el deterioro económico percibido por la ciudadanía y el impacto inicial del escándalo de corrupción que involucró a la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS). La elección fue observada como un termómetro clave de cara a los comicios legislativos nacionales programados para octubre de ese año.
El colapso de una estrategia legislativa insostenible
Un análisis de la actividad parlamentaria a lo largo del año revela un cambio drástico en la fortaleza negociadora del gobierno. Reportes indican que, hasta marzo, la administración de Milei logró triunfar en 15 de 17 votaciones. Sin embargo, a partir de abril, esa tendencia se revirtió por completo, perdiendo 16 de 17 votaciones legislativas, lo que sugiere un colapso en la negociación.
Expertos han descrito estas derrotas como «autoinfligidas», ya que la composición del Congreso no se modificó en ese período. Esto apuntaría a errores tácticos y a una pérdida de apoyos clave dentro del arco político, incluso entre bloques que inicialmente mostraban cierta afinidad. La capacidad de gestión legislativa se vio seriamente cuestionada.
Dos derrotas simbólicas resaltan en este contexto. El 5 de septiembre, el Senado rechazó por amplia mayoría un veto presidencial a una ley que declaraba la emergencia en discapacidad. Esta acción, que obliga al Estado a aumentar fondos, se convirtió en la primera vez en 22 años que el Congreso nacional revierte un veto de un presidente, marcando un hito institucional.
Adicionalmente, la Cámara Alta aprobó modificaciones a la Ley de Decretos de Necesidad y Urgencia (DNU), buscando restringir las competencias del Poder Ejecutivo para gobernar por decreto. Esta reforma, que debe ser tratada en Diputados, representa un desafío directo a la estrategia de Milei de avanzar su agenda sin un consenso legislativo amplio.
Fracturas internas: el fuerte deterioro de las alianzas
El bloque parlamentario oficialista, La Libertad Avanza, comenzó a mostrar fisuras evidentes en su cohesión. Un grupo de diputados disidentes formó la bancada «Coherencia», manifestando su descontento con el estilo de liderazgo verticalista ejercido por Martín Menem, presidente de la Cámara de Diputados. Este movimiento evidenció una tensión interna no resuelta.
La relación con la vicepresidenta de la Nación, Victoria Villarruel, también se vio deteriorada. El punto de quiebre se produjo tras su apoyo público a iniciativas legislativas como el aumento de pensiones para jubilados, una medida que el presidente Milei calificó de «traición». Este episodio abrió una grieta política dentro de la coalición de gobierno.
La pérdida de apoyo en el recinto ha complicado de manera sustancial la capacidad de la administración para impulsar los proyectos centrales de su agenda de desregulación y ajuste fiscal. Esta situación ha forzado a una dependencia aún mayor de instrumentos como los DNU, cuyo uso futuro se encuentra ahora bajo un escrutinio y restricción renovados por parte del Legislativo.
Caída en los índices de popularidad: poca confianza en todos los flancos
Diversas encuestas publicadas hacia agosto de 2025 reflejaron un deterioro significativo en la imagen pública de Javier Milei. Firmas como Trespuntozero y La Sastrería, junto con estudios de la Universidad Torcuato di Tella, reportaron una caída del 13.6% en el índice de confianza hacia su gestión. La imagen negativa del presidente alcanzó el 58.5%.
Este declive en la valoración ciudadana ha sido atribuido por analistas a la percepción de inestabilidad política y a la repercusión constante de los escándalos de corrupción que salpican a su círculo íntimo. El capital político del oficialismo se vio afectado de cara a la contienda electoral de octubre.
Un incidente durante un acto de campaña en Lomas de Zamora, donde Milei fue evacuado tras ser atacado con piedras y proyectiles, reflejó el creciente descontento social y un clima de alta tensión. El gobierno atribuyó el hecho al kirchnerismo, lo que contribuyó a profundizar la polarización política en el país.
Casos de corrupción en el entorno de Javier Milei
La promoción y colapso de la criptomoneda $libra:
En febrero de 2025, Javier Milei utilizó su cuenta de la red social X para promocionar la criptomoneda $LIBRA. Tras su publicación, el valor del activo digital experimentó un alza abrupta para luego colapsar por completo, generando pérdidas millonarias para una gran cantidad de pequeños inversores. Se identificó que unas pocas billeteras digitales obtuvieron ganancias superiores a los 180 millones de dólares.
La investigación judicial estableció que la criptomoneda fue creada por Hayden Davis, un ciudadano estadounidense que contaba con acceso privilegiado a la Casa Rosada, autorizado por Karina Milei, hermana del presidente y secretaria general de la Presidencia. La Justicia investiga a los involucrados por posibles delitos de estafa, abuso de autoridad y tráfico de influencias.
Aunque el presidente negó conocer los detalles técnicos del proyecto y eliminó la publicación inicial, el escándalo financiero dañó su credibilidad internacional, tras recibir denuncias en Argentina, España y Estados Unidos. El caso fue catalogado por especialistas en criptoactivos como un posible «rug pull» o estafa de manipulación de mercados.
El esquema de sobornos en la agencia nacional de discapacidad:
El 20 de agosto de 2025, se dieron a conocer audios filtrados de Diego Spagnuolo, entonces director de la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS). En las grabaciones, se revelaba una presunta red de sobornos en las licitaciones para la compra de medicamentos. Spagnuolo detallaba que los laboratorios pagaban comisiones del 8%, de las cuales un «3% iba a Karina Milei» y otro porcentaje a Martín Menem.
Se estimó que este esquema irregular recaudaba entre 500.000 y 800.000 dólares mensuales. Spagnuolo, quien se identificaba como amigo personal del presidente, afirmó en dichos audios haber informado de las irregularidades a Milei, sin que esto derivara en acción alguna. La justicia federal, a cargo del juez Sebastián Casanello, ordenó 16 allanamientos.
Como resultado de los procedimientos, se incautaron teléfonos, computadoras y una máquina de contar billetes en la vivienda del exfuncionario. Karina Milei, a quien se alude en los audios como «El Jefe», no se ha pronunciado públicamente sobre las acusaciones. El presidente, por su parte, calificó los hechos como una «operación política» del kirchnerismo.
Otros casos de opacidad y favoritismo:
En febrero de 2025, un avión privado propiedad de Leonardo Scatturice, un empresario con cercanía a la Casa Rosada, ingresó al país con maletas que eludieron el control aduanero habitual. A bordo viajaba Laura Arrieta, miembro de la CPAC. La Fiscalía investiga si existió una «decisión expresa» para evitar la revisión, en un posible caso de tráfico de influencias.
Paralelamente, han cobrado relevancia contratos estatales adjudicados a empresas vinculadas a la familia Menem, en particular a Eduardo «Lule» Menem y al propio Martín Menem. Estas operaciones, por sumas millonarias durante 2024 y 2025, han alimentado las sospechas de favoritismo en la adjudicación de obra pública y compras estatales.
Otro caso que generó críticas fue la demora en la gestión de la alerta por fentanilo contaminado. Médicos de la ciudad de Rosario advirtieron sobre el problema en febrero, pero la Agencia Nacional de Medicamentos (ANMAT) tardó tres meses en emitir una comunicación oficial. La negligencia llevó a la destitución de la directora del INAME.
Impacto político y social de los acontecimientos:
La sucesión de eventos ha tenido un efecto corrosivo sobre la narrativa «anti-casta» que definió la campaña y los inicios del gobierno de Javier Milei. La percepción ciudadana, según se desprende de encuestas, indica que una mayoría de los votantes considera que estas acusaciones representan una contradicción evidente con las promesas originales de transparencia.
En el ámbito económico, las derrotas parlamentarias y la inestabilidad política han contribuido a elevar el riesgo país, que alcanzó los 829 puntos básicos. Este nivel de riesgo complica el acceso a financiamiento internacional necesario para refinanciar los vencimientos de deuda de 2026, poniendo en jaque el programa de estabilización.
La respuesta del gobierno ha sido atribuir sistemáticamente los escándalos y reveses a maniobras de la oposición política. Milei ha intensificado su retórica contra la casta, aunque su silencio inicial frente a las acusaciones de corrupción y la falta de acciones contundentes han generado críticas por inconsistencia en su discurso.
El principal desafío electoral inmediato lo constituyen las elecciones legislativas nacionales de octubre de 2025. El oficialismo se enfrenta a la necesidad de recuperar apoyo en un Congreso que se muestra mayoritariamente opositor, y donde el peronismo ha capitalizado su debilidad para impulsar medidas de gasto social que contradicen su agenda de ajuste.
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