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Tras una operación de seguimiento que se extendió por más de cinco meses, la Policía colombiana logró la captura en Buenaventura, Valle del Cauca, de Luis Henry Valencias Riascos, conocido como El Lanchero, uno de los narcotraficantes más perseguidos por la justicia de El Salvador y pieza clave en el engranaje del narcotráfico internacional.
La detención se produjo en cumplimiento de una notificación roja de Interpol y en el marco del programa de cooperación internacional PACcTO 2.0. La Fiscalía colombiana confirmó que el operativo se concretó gracias a un minucioso trabajo de intercambio de información en tiempo real con la Oficina Central Nacional (OCN) de El Salvador, así como a labores de inteligencia, verificación en terreno y el apoyo de fuentes humanas.
Según las investigaciones, El Lanchero aprovechaba su experiencia como lanchero en el Pacífico colombiano para mover cargamentos de cocaína en embarcaciones tipo go-fast, partiendo desde Buenaventura hacia el Pacífico Central. Desde allí, los envíos eran redirigidos hacia Centroamérica, con destino final en México y Estados Unidos. “Su experticia en el mar y conocimiento de las rutas lo convirtieron en un objetivo de alto valor”, aseguró el director de la Policía Nacional, general Carlos Fernando Triana.
La Oficina de Interpol celebró la captura a través de sus canales oficiales, subrayando la importancia de la cooperación internacional en la lucha contra el narcotráfico transnacional. La Fiscalía General de la Nación asumió la disposición del capturado, quien deberá responder por delitos relacionados con tráfico ilícito de estupefacientes.
El arresto de El Lanchero representa un golpe certero a las redes criminales que operan entre Suramérica y Centroamérica, y reafirma la creciente presión de los Estados contra las rutas marítimas del narcotráfico que alimentan el mercado estadounidense.
