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Desde el corazón del Putumayo, Colombia ha lanzado una propuesta que trasciende fronteras y se proyecta como un hito para la conservación mundial: la creación de un corredor trinacional con Perú y Ecuador para proteger al jaguar y a los felinos silvestres que recorren la Amazonía sin reconocer límites políticos.
La iniciativa surgió en Mocoa, durante el cuarto taller regional de la gira nacional Colombia Felina, donde más de 110 participantes -comunidades indígenas, afrodescendientes, campesinos, líderes locales, academia e instituciones ambientales- se unieron para delinear la hoja de ruta que guiará la conservación de felinos silvestres hasta 2050.
“El jaguar es símbolo de vida y de equilibrio; cuidarlo significa garantizar la supervivencia de nuestros ecosistemas. Por eso desde Putumayo proponemos este corredor trinacional, que unirá territorios compartidos con Perú y Ecuador, y permitirá mantener viva la conectividad que la naturaleza exige”, afirmó el viceministro de Políticas y Normalización Ambiental, Mauricio Cabrera Leal.
El encuentro, apoyado por el programa GEF Corazón de la Amazonía y WWF Colombia, y facilitado por Corpoamazonía, consolidó un compromiso colectivo: convertir la protección del jaguar en una causa común que articule ciencia, política pública y saberes ancestrales. Desde el Parque Nacional Natural La Paya, en la frontera con Ecuador, se subrayó la urgencia de asegurar corredores que permitan la supervivencia de poblaciones transfronterizas de jaguar, cuya conservación depende de la cooperación conjunta entre naciones.
Las voces de los pueblos originarios marcaron un momento decisivo. La Asociación de Cabildos Indígenas del Alto y Bajo Predio Putumayo (ACILAPP) compartió su visión de coexistencia con el jaguar, recordando que este animal sagrado es parte de la memoria viva de la Amazonía. Su aporte, junto al de comunidades afrodescendientes y campesinas, le dio al programa un enfoque territorial y cultural que trasciende la visión técnica para convertirse en un proyecto profundamente humano.
El taller de Mocoa, uno de los ocho previstos en esta gira nacional, no solo definió acciones locales, sino que abrió la puerta a una estrategia internacional inédita que será presentada en su versión final el próximo 29 de noviembre, Día Internacional del Jaguar.
Con este paso, Colombia reafirma su liderazgo en la defensa de la biodiversidad amazónica y demuestra que la cooperación trinacional no es solo un ideal, sino una necesidad urgente frente a la crisis ambiental global. El jaguar, emblema de la selva y guardián de los ecosistemas, se convierte así en el símbolo de una causa común que une a tres naciones bajo una misma visión: proteger la vida más allá de las fronteras.
