

El mundo literario y cultural de Asturias se encuentra de luto tras el fallecimiento de Xuan Bello, uno de los escritores más relevantes de la región y un ferviente defensor de la lengua asturiana. Bello, quien murió ayer a los 60 años en el Hospital Universitario Central de Asturias (HUCA) en Oviedo, dejó un legado que trasciende fronteras y generaciones. Su muerte, causada por un aneurisma de aorta mientras era intervenido de urgencia, ha generado una profunda conmoción en su tierra natal y entre sus admiradores.
El concejo natal del escritor, Tineo, ha decretado luto oficial en honor a su memoria. Este gesto refleja el impacto que tuvo su obra y su figura en la comunidad local, donde era considerado un símbolo cultural. La noticia de su fallecimiento llegó como un golpe inesperado, dejando una sensación de vacío entre quienes lo conocieron y disfrutaron de su literatura.
Xuan Bello nació en Paniceiros, en el concejo de Tineo, hace 60 años. Desde joven mostró un talento precoz para las letras, publicando su primer libro de poemas, *Nel cuartu mariellu*, a los 16 años. Su carrera literaria continuó con obras como *El llibru de les cenices* (1988), *Los nomes de la tierra* (1991), y *El llibru vieyu*, que le valió el premio Teodoro Cuesta de poesía.
En 1999, su obra poética alcanzó mayor proyección con la publicación de *La vida perdida*, una antología bilingüe en asturiano y castellano. Sin embargo, fue con *Hestoria Universal de Paniceiros* que obtuvo reconocimiento nacional e internacional. La traducción al castellano de esta obra le valió el premio Ramón Gómez de la Serna en 2003 y se convirtió en uno de los libros más destacados por los críticos españoles ese año.
Bello también incursionó en el ensayo y el relato con títulos como *Pantasmes, mundos, laberintos* (1996), *La memoria del mundu* (1998), *Meditaciones nel desiertu* (2003), y *Los Cuarteles de la memoria* (2003). Su capacidad para combinar poesía y narrativa lo posicionó como una figura clave en la literatura asturiana contemporánea.
En 2017 recibió el Premio Nacional de Literatura Asturiana en su primera edición, un reconocimiento que destacó la calidad y relevancia de su obra. El jurado resaltó su papel fundamental en la dignificación y visibilización de la literatura asturiana y la lengua asturiana, así como su proyección internacional gracias a las numerosas traducciones de sus libros.
Xuan Bello no solo fue un escritor prolífico; también fue un defensor incansable de la lengua asturiana. Su obra contribuyó significativamente al fortalecimiento cultural y lingüístico de Asturias, convirtiéndose en un referente para quienes trabajan por la preservación del idioma. La Academia de la Llingua Asturiana, de la que era miembro correspondiente, lo recordó como una figura esencial para la institución y para la literatura regional.
La noticia de su muerte generó una ola de mensajes de condolencia y homenajes desde diversos sectores de la sociedad asturiana. El presidente del Principado, Adrián Barbón, expresó su dolor por la pérdida, mientras que la consejera de Cultura, Vanessa Gutiérrez, compartió su conmoción y destacó el impacto inesperado de esta tragedia.
Organizaciones culturales como Iniciativa Pol Asturianu lamentaron su partida y anunciaron actos conmemorativos para honrar su legado. En redes sociales, especialmente en X (antes Twitter), numerosos usuarios compartieron mensajes recordando su obra y personalidad.
La muerte de Xuan Bello deja un vacío profundo en el ámbito cultural y literario asturiano. Su obra no solo enriqueció el panorama literario regional, sino que también logró trascender fronteras gracias a su calidad y profundidad. Como testimonio del afecto que generaba entre sus lectores, muchos han reproducido versos del autor en sus mensajes de despedida.
Esta tarde se llevará a cabo un acto de despedida en memoria del escritor a las 19 horas. Mañana jueves, a las 13:30 horas, se celebrará el funeral en la parroquia de San Frichoso, en Paniceiros, donde descansará eternamente en su tierra natal.
Xuan Bello deja un legado imborrable que seguirá siendo fuente de inspiración para escritores y defensores de la cultura asturiana. Su obra y compromiso con la lengua asturiana permanecerán como testimonio vivo de su amor por su tierra y por las letras.
Con información Javier Pertierra
