Conexión ganadera: Estafas a inversores de Nueva Helvecia y Valdense ascienden a más de 500.000 dólares

Lo que parecía una sólida inversión que aseguraba grandes rentabilidades a sus inversores, resultó el segundo fraude financiero más grande de la historia de Uruguay después del caso Peirano y el más grande en la ganadería de nuestro país, estimándose entre 250 y 400 millones de dólares. HELVECIA tuvo acceso al documento donde se nombran los 4.300 afectados a nivel país, siendo algunos de ellos personas físicas y empresas de n uestra región.

Una auditoría reveló que la empresa operaba bajo un esquema Ponzi, utilizando el dinero de nuevos inversores para pagar a los anteriores, hasta que la estructura se hizo insostenible. La justicia tomó cartas en el asunto, congeló los activos y cerró fronteras para los directivos. Todavía continúan en investigación tras la dudosa muerte Gustavo Basso, uno de los dos fundadores de la empresa.

Basso junto a Pablo Carrasco desde 1999 se dedicaban a ofrecer inversiones en el sector ganadero. Su modelo de negocio permitía a los inversores financiar actividades relacionadas con el ganado, como la cría y el engorde, a cambio de una rentabilidad financiera alta.

En el listado de más de 4300 damnificados por la empresa Conexión Ganadera, pudimos identificar inversores de la zona, Nueva Helvecia y Colonia Valdense, que invirtieron alrededor de 500.000 dólares, nombres que no serán divulgados por HELVECIA para respetar la privacidad de los inversionistas.

Puntualmente en Nueva Helvecia son 3 los inversores que destinaron más de 50.000 dólares a Conexión Ganadera, uno con un total de 215.000 dólares, otro con 128.185 dólares y un tercero con 51.118 dólares. Luego hay otros en la zona con inversiones que iban desde los 17.000 a los 20.000 dólares.
Dinero este irrecuperable, según declaraciones recientes de Eduardo Blasina, quien manifestó que “es imposible” que los inversores recuperen el dinero perdido en Conexión Ganadera; además, el activo de la empresa, en su mayoría ganado, “se deteriora día a día”. “De las enseñanzas que deja esto es que uno no puede poner carteles en la carretera y que no hubiera ningún control”, continuó, y lamentó que “mucha gente en base a la confianza ponía el dinero y no controlaba”, ya que “el consenso” era que los directores de la compañía “eran gente honorable”.

Ahora la pregunta es cómo afecta a la microeconomía neohelvética esta situación. Consultando profesionales como fuentes fiables, todos coincidieron en afirmar que depende del caso, porque en definitiva es dinero que se utilizó a modo de inversión, en vez de depositar en el banco o invertir en otros negocios, eligieron Conexión ganadera, lo que no afecta a sus negocios que siguen funcionando. Puede decirse que perdieron parte de sus ahorros.

Ahora si la persona que invirtió está relacionada con la industria ganadera, “se le puede complicar”, porque pierde dinero para seguir trabajando. También consideraron el stress que a nivel psicológico puede afectar a la persona en concreto perder una suma de dinero, que es posible no pueda recuperar.