

La 14ª Bienal del Mercosur ha dado inicio con una propuesta que celebra la riqueza cultural y artística de América Latina. En esta edición, la Fundación Ecarta, ubicada en la Ciudad Baixa de Porto Alegre, se convierte en un punto destacado al presentar una obra única del reconocido arquitecto y artista boliviano Freddy Mamani. En lugar de exponer dentro de sus instalaciones, la Fundación ha transformado su propia fachada en un lienzo vivo, decorado con los vibrantes colores y complejos símbolos de la «nueva arquitectura andina», también conocida como Cholet.
Una Obra que Conecta Cosmologías Andinas y Arte Contemporáneo
La pintura que ahora adorna el edificio de la Fundación Ecarta integra elementos gráficos inspirados en la cosmología de los pueblos andinos, un sello distintivo del trabajo de Freddy Mamani. Este arquitecto, ingeniero y pedrero originario de El Alto, Bolivia, es conocido por reinterpretar las tradiciones indígenas Aymara a través de su peculiar estilo arquitectónico, caracterizado por el uso de formas geométricas audaces y colores intensos.
El jueves 27 de marzo, Mamani ofreció una visita mediada que marcó la apertura oficial de esta intervención artística. Durante el recorrido, el artista compartió detalles sobre su trayectoria, sus influencias y el proceso creativo detrás de la obra realizada en el edificio. «Es una forma de integración de los pueblos latinoamericanos a través de los colores y la arquitectura», señaló Mamani, destacando el carácter simbólico de su trabajo.
Celebraciones con Danza y Reflexión
La inauguración no se limitó a la obra visual en sí. Inspirado por la energía y los colores de la fachada, el grupo Folcloreando presentó una demostración de danzas latinoamericanas en la calzada frente al edificio. Las bailarinas Carla Pfeifer y Marta Severo ofrecieron una interpretación que celebró las tradiciones culturales de la región, complementando el espíritu festivo del evento.
Marcos Fuhr, presidente de la Fundación Ecarta, expresó su entusiasmo por esta colaboración: «Estamos muy felices y honrados con esta participación que coincide con las festividades de 20 años de la Fundación Ecarta. Esto representa un reconocimiento a nuestra actuación como espacio de arte contemporáneo desde 2005».
Exposiciones Internacionales y Reflexión Curatorial
Además de la obra de Mamani, la Fundación Ecarta albergará exposiciones de tres artistas extranjeras: Minia Biabiany, Tang Han y Sara Modiano. Sus obras estarán disponibles para el público dentro del histórico edificio, ampliando el diálogo entre diversas perspectivas artísticas.
Como parte de las celebraciones del vigésimo aniversario, el sábado 29 de marzo se llevará a cabo un coctel de apertura seguido por una conversación con Lucas Dilacerda, curador y crítico de arte cearense. Dilacerda compartirá su experiencia y reflexiones sobre su trabajo curatorial en la Pinacoteca del Ceará, ofreciendo un espacio para profundizar en las conexiones entre las prácticas artísticas contemporáneas y los contextos culturales locales.
La Importancia de Espacios como la Fundación Ecarta
La participación de la Fundación Ecarta en la Bienal del Mercosur reafirma su papel como un espacio clave para el arte contemporáneo en Brasil. Desde su creación en 2005 con la Galería Ecarta como proyecto inaugural, esta institución ha promovido una rica diversidad artística, fomentando diálogos interculturales y explorando nuevas formas de expresión creativa.
La intervención de Freddy Mamani no solo embellece el paisaje urbano de Porto Alegre, sino que también invita a reflexionar sobre cómo las tradiciones indígenas pueden dialogar con el arte contemporáneo para generar nuevas narrativas visuales y culturales. La Bienal del Mercosur, con su enfoque en la integración regional, se convierte así en un escenario ideal para destacar estas contribuciones artísticas únicas.
La colaboración entre Freddy Mamani y la Fundación Ecarta no es solo una celebración del arte andino, sino también un recordatorio del poder del arte para conectar culturas, historias y comunidades. En un mundo cada vez más globalizado, iniciativas como esta destacan la importancia de preservar y reinterpretar las tradiciones locales dentro de un marco contemporáneo.
Si tienes la oportunidad, no te pierdas esta vibrante obra en la Avenida João Pessoa esquina con la calle Lopo Gonçalves en Porto Alegre. Es un testimonio visual del diálogo entre lo antiguo y lo moderno, lo local y lo global, lo individual y lo colectivo. Un verdadero regalo para los sentidos y el alma.
