El Gobierno denunció que hubo “sabotaje” en la licitación y ordenó una investigación

Tras la presentación de una única oferta en la licitación de la vía navegable troncal, a cargo de la belga DEME, a pesar de contar con 11 empresas interesadas que habían realizado consultas, el Gobierno dio de baja la licitación, denunció sabotaje y vaciamiento en el proceso y ordenó una investigación al respecto.

Manuel Adorni, a cargo de la Vocería Presidencial, destacó que desde el inicio, la licitación buscó “los más altos estándares y el mejor precio” y que el Gobierno “se comprometió a licitar de manera transparente y competitiva” las obras en la VNT “para garantizar el mejor servicio a la producción”.

“Se afirmó en su momento que si había un sólo oferente se daría de baja la licitación”, anticipó Adorni, en una conferencia de prensa que no recibió preguntas y compartió con el titular de la Agencia Nacional de Puertos y Navegación (ANPYN), Iñaki Arreseygor.

Llamativo

“Llama la atención -advirtió Adorni- que la única oferta presentada fue de DEME, que tiñó el proceso de falta de transparencia y falso direccionamiento, con reclamos administrativos y demandas en la Justicia”.

Asimismo, recordó que “pese a que más de 11 empresas se encontraban inscriptas y realizaron consultas, sólo una empresa ofertó”.

En tal sentido, anunció que el Gobierno instruirá a la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia “que investigue si hubo presión de parte de DEME sobre otras empresas o una presunta asociación ilícita” en contra del Estado. 

“Esto servirá para investigar y demostrar a todos los actores interesados que el Gobierno será implacable ante cualquier intento de manipular resultados, y que llevará a la Justicia Penal a los responsables de defraudar” al Estado, concluyó.

Vivos

A su turno, Arreseygor refrendó lo denunciado por Adorni: “DEME se presentó en un proceso transparente 3 veces avalado. Pero un grupo de vivos operó el vaciamiento de ofertas para frustrarlo en desmedro de los productores, que son los principales perjudicados de no poder tener ofertas para comparar”.

“Nos acusaron de direccionar la licitación para sabotear el proceso. Y llama la atención (que la denuncia de direccionamiento) sea DEME, el artífice de las acusaciones. Había 11 interesados y múltiples consultas que decidieron no presentarse por arte de magia”, agregó visiblemente molesto Arreseygor.

“No somos tibios como (el Gobierno de) Alberto Fernández. Vamos a seguir avanzando en la licitación y mantenemos el compromiso asumido con los productores agropecuarios de modernizar la VNT. Pusimos la vara alta y la vamos a mantener alta. Vamos a investigar y perseguir a los involucrados en sabotear la licitación. Y tras la investigación, vamos a seguir adelante con la licitación”, concluyó.

Adorni había señalado a su turno que “durante el procedimiento, desde la política, los medios y las empresas hicieron lobby y demandaron al Gobierno que baje los estándares técnicos (de la licitación) y se acusó de direccionamiento en favor de Jan De Nul, que no ofertó”.

Adorni subrayó que “cada impugnación fue respondida y los argumentos fueron validados 3 veces en la Justicia, que concluyó que no hubo ninguna irregularidad” durante el proceso licitatorio.