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Facatativá, Cundinamarca, reconocido por su producción de flores, enfrenta un reto crítico: las secuelas del cambio climático amenazan el equilibrio ambiental y la calidad de vida de sus habitantes. En respuesta a esta emergencia, un grupo de 107 jóvenes voluntarios de ASEZ (Save the Earth from A to Z), movimiento universitario global de la Iglesia de Dios Sociedad Misionera Mundial, tomó la iniciativa el pasado 26 de enero, liderando una jornada histórica de limpieza y reforestación en el barrio Manablanca.
Conscientes de que el cambio empieza con pequeñas acciones, los voluntarios de ASEZ, acompañados de sus familias, se dieron cita en el icónico “Puente de los Micos” para dar inicio a la jornada. Equipados con bolsas, guantes y tapabocas proporcionados por la Alcaldía de Facatativá, trabajaron arduamente en la limpieza del caño del barrio. En pocas horas, lograron retirar 15 toneladas de residuos sólidos, entre plásticos y escombros, transformando un espacio antes descuidado en un entorno más limpio y habitable.
La actividad no terminó allí. Los voluntarios se desplazaron a una zona montañosa del barrio que había sido devastada por un incendio años atrás. Allí, en colaboración con la Alcaldía y la empresa de agua del municipio, llevaron a cabo la siembra de 107 árboles, simbolizando un nuevo comienzo para el ecosistema local. Esta acción busca no solo restaurar el equilibrio ambiental, sino también mitigar los efectos del cambio climático a través de la reforestación.
El alcalde de Facatativá, Luis Carlos Casas, agradeció profundamente el esfuerzo colectivo y destacó el impacto de la iniciativa: “Ofrecer un ambiente limpio y saludable a las familias de Manablanca es una prioridad. Gracias a la dedicación de estos jóvenes, estamos construyendo un entorno mejor para nuestros niños y para las generaciones futuras”.
Por su parte, Jairo Armando Triviño, vicepresidente del Concejo Municipal, expresó su admiración por el compromiso de los voluntarios: “La labor de ASEZ nos inspira a todos. Ver a jóvenes universitarios liderando con acciones concretas nos da esperanza en el futuro de nuestra comunidad y nuestro planeta”.
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El representante de ASEZ en Bogotá compartió la visión del grupo: “Nuestro propósito no es solo limpiar y reforestar, sino también crear conciencia sobre la importancia de proteger el medio ambiente. Estas actividades son el inicio de un trabajo continuo que continuará a lo largo del 2025”.
La jornada no solo dejó una marca visible en el paisaje de Facatativá, sino que también fortaleció el vínculo entre la comunidad, las autoridades locales y los voluntarios. La Alcaldía, además de proporcionar insumos, ofreció un almuerzo para los participantes, reconociendo el esfuerzo conjunto.
ASEZ, cuyo nombre significa “Salvar la Tierra desde la A hasta la Z”, es un movimiento universitario internacional que busca enfrentar los desafíos ambientales a través del servicio voluntario. Su labor en Facatativá es un claro ejemplo de cómo la juventud puede liderar transformaciones significativas, inspirando a otros a sumarse a la causa por un planeta más sostenible.
Acciones como estas demuestran que, incluso en medio de las adversidades, el compromiso colectivo puede marcar la diferencia. Los 107 árboles plantados no solo representan un aporte al medio ambiente, sino también la esperanza de un futuro más verde y consciente, liderado por una nueva generación que entiende su papel como guardianes de la Tierra.
carloscastaneda@prensamercosur.org
