Redacción Central
Una de las novedades de la reforma tributaria, la devolución de impuestos para familias de bajos ingresos, llamada cashback, nació como una herramienta para hacer más progresivo el sistema tributario. La progresividad consiste en hacer que los más pobres paguen proporcionalmente menos impuestos que los más ricos.
Debido a que tienen tasas como porcentaje del precio de los bienes, los impuestos relacionados con el consumo tienen un efecto regresivo y perjudican proporcionalmente a los menos favorecidos. En la compra de cualquier mercancía, los pobres y los ricos pagan el mismo impuesto, pero los menos favorecidos consumen una mayor parte de la renta al comparar el impuesto con el salario.
En el caso de un paquete de arroz de R$ 25, con una tasa impositiva al consumo del 25%, el impuesto equivaldría a R$ 6,25. Sin embargo, este monto hace que el trabajador que gana un salario mínimo de R$ 1.518 pague el 0,41% de los ingresos, mientras que un comprador que gana R$ 10 mil gastará el 0,062% de los ingresos.
Para corregir la distorsión, la reforma fiscal insertó el cashback para las familias inscritas en el Registro Único de Programas Sociales del Gobierno Federal (CadÚnico). Instituido en la reforma constitucional de la reforma del impuesto al consumo de 2023, el mecanismo tuvo su alcance definido por la ley complementaria sancionada el jueves pasado (16).
De acuerdo con la ley complementaria, habrá una devolución del 100% del Impuesto sobre Bienes y Servicios (CBS) y al menos el 20% del Impuesto sobre Bienes y Servicios (IBS) a la población de bajos ingresos en:
•Agua;
• Cilindro de gas;
• Facturas de teléfono e internet;
•Energía eléctrica;
•Aguas residuales.
Para el resto de productos y servicios, el reembolso será equivalente al 20% del CBS y el IBS. En el caso del SII, los estados y municipios tendrán autonomía para definir si la devolución será superior al 20%.
Detallando
La forma en que se producirá el retorno seguirá siendo definida por la legislación posterior. Una de las posibilidades es comparar el Registro de Contribuyente Individual (CPF) en la factura, el valor de la compra y la inscripción en CadÚnico. En el caso de la devolución del IBS, también se puede requerir un sistema de verificación automática de la dirección del comprador, disponible en CadÚnico.
En 2023, el secretario extraordinario de la reforma tributaria, Bernard Appy, citó, en una audiencia pública en la Cámara de Diputados, el ejemplo de Rio Grande do Sul. En 2021, el estado implementó un sistema para devolver el Impuesto a la Circulación de Bienes y Servicios (ICMS) a las familias inscritas en el Registro Único con ingresos de hasta tres salarios mínimos a través de una tarjeta de crédito.
Inicialmente, el gobierno de Rio Grande do Sul devolvía un monto fijo por familia y ahora ha comenzado a devolver por CPF, a partir del cruce de datos entre el valor de la compra y el estado de registro de la familia. En lugares remotos, sin acceso a internet, Appy sugirió un sistema de transferencia directa de ingresos, complementario al Bolsa Familia.
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Carlos Castañeda
Hernán Sabater
Redacción Central
Alexis Martínez Diaz
Edna Xiomara
