La Alianza Evangélica Mundial (WEA, por sus siglas en inglés), juntamente con el Consejo Mundial de Iglesias y Christian Solidarity International, además de una coalición de otras organizaciones globales, ha publicado un comunicado en el que pide a la comunidad internacional que aproveche la COP 29 (la Conferencia de la Naciones Unidas sobre el Cambio Climático), que se celebra en Bakú, para presionar a Azerbaiyán y exigirle el cese de la vulneraciones de derechos humanos en Nagorno-Karabaj.

La última escala de violencia en el territorio, en el último cuatrimestre de 2022, acabó con una ocupación por parte de Azerbaiyán que ha ocasionado el desplazamiento forzado de más de 120.000 armenios, así como el bloqueo del Corredor de Lachín, la única franja de tierra que conecta Armenia con la región y en la que todavía vive mucha población armenia, lo que está provocando dificultades en la llegada de ayuda humanitaria y otras violaciones de derechos humanos.

Uno de los hechos al que hacen referencia la Alianza Evangélica Mundial y las otras entidades que firman el documento es la prisión permanente en la que se encuentran al menos 23 armenios por parte del ejército de Azerbaiyán, entre ciudadanos, soldados y líderes políticos, en lo que denominan un fenómeno general de “limpieza étnica” en la región.“La despoblación sistemática de Nagorno-Karabaj por parte de Azerbaiyán ha sido calificada por numerosas autoridades de limpieza étnica”, puede leerse en el texto.

La COP29 como tapadera

Tanto la Alianza Evangélica Mundial como el resto de organizaciones que firman el documento consideran que el gobierno de Azerbaiyán está aprovechando el desarrollo de la COP29 en su capital para “cubrir” un caso de “limpieza étnica”. 

“Azerbaiyán ha prometido que la COP29 será una ‘COP de paz’ […] Expresamos nuestra solidaridad con los pueblos desplazados de Nagorno-Karabaj. Rechazamos la utilización

de la Conferencia de la ONU sobre el Cambio Climático para encubrir los crímenes contra la humanidad que condujeron a su desplazamiento”, aseguran la Alianza Evangélica y el resto de entidades.

Además, exigen al gobierno de Ilham Alíyev que libere de forma “inmediata” a los prisioneros armenios que todavía permanecen encarcelados y que “contribuya a una paz duradera en la región, facilitando el regreso seguro de la población de etnia armenia de Nagorno-Karabaj a su patria”.

También animan a los participantes de la COP29 a “plantear estas cuestiones” en el transcurso de la celebración de la conferencia en Bakú.

La Corte Internacional de Justicia mediará en el conflicto

El comunicado coincide con un anuncio por parte de la Corte Internacional de Justicia con el que se declara a sí mismacompetente para evaluar las acusaciones de limpieza étnica en Nagorno-Karabaj y mediar en el conflicto.

A pesar de las objeciones de Azerbaiyán, el tribunal ha fallado que “tiene jurisdicción”, en base a la Convención Internacional sobre la Eliminación de Todas las Formas de Discriminación Racial, para tratar la denuncia presentada en 2021 por Armenia contra el gobierno azerí por presuntas violaciones de los derechos humanos. “Tras considerar la correspondencia intercambiada y las reuniones entre las partes entre noviembre de 2020 y octubre de 2021, la Corte concluye que Armenia hizo un intento genuino de entablar negociaciones con Azerbaiyán para resolver la disputa”, señalan desde la Corte Internacional de Justicia.

El tribunal trabajará en determinar si “los actos específicos denunciados por Armenia pueden constituir un trato discriminatorio basado en el origen nacional o étnico armenio de las víctimas”, después de que en su denuncia, el gobierno armenio afirmase que Azerbaiyán ha sometido “a personas de etnia armenia, civiles o miembros de las fuerzas armadas de Armenia, a actos de asesinato, tortura y trato inhumano”, además de detenciones arbitrarias y desapariciones forzosas.

Por su parte, Azerbaiyán también inició una acusación de limpieza étnica contra Armenia sobre la que todavía no se ha pronunciado la Corte. No obstante, entidades y ONG como la Alianza Evangélica Mundial ponen el foco en las devastadoras consecuencias del conflicto para la población armenia. “Hoy, el patrimonio y la cultura armenios de la región están siendo borrados por Azerbaiyán. Iglesias, cementerios y pueblos enteros han sido arrasados. La destrucción de lugares cristianos ilustra la amenaza que la agresión de Azerbaiyán supone para la libertad religiosa y el pluralismo en la región”, señalan.

Gracias a quienes aportan económicamente podemos hacer esta labor de comunicación desde una perspectiva evangélica a través de una plataforma gratuita, con el propósito de ser sal y luz en nuestra sociedad. Si quieres que Protestante Digital pueda continuar con esta labor, ¡anímate a ser parte! Te necesitamos.

Encuentra más información en apoya.protestantedigital.com.