El club Pacífico en su máxima expresión

Hace 37 años, en junio de 1987, el club Pacífico derrotó, con un par de semanas de diferencia, a los poderosos equipos de Atenas de Córdoba y Ferrocarril Oeste, en el marco de la Liga Nacional de basquet.

Primer fue Ferro. “Espectacular, por todo. Por el juego y el marco. Por la vibración, la paridad, el desarrollo y el final”. La síntesis de este diario daba cuenta del magnífico triunfo ante uno de los candidatos al título y que dejaba al local en las puertas de la clasificación.

El verde se apoyó en “las prodigiosas piernas de Richotti, el oportunismo del zurdo De Battista, el gol de Downey, el espíritu de Julio Rodríguez” para su hazaña. Era el equipo de barrio venciendo al gigante, por eso el final de 98 a 87 sumió al gimnasio de Castelli y Charlone en un pandemónium. Veinte puntos de Richotti, 17 de Rodríguez, 16 del zurdo, 20 de Hilton y 23 de Downey. Más paridad de goleo imposible en el equipo de Carlos Boismené. En Ferro, 32 de Horacio López, 15 de Cortijo, 8 de Maggi y 14 de Darrás.

Ahora seguía Atenas. La cancha era una caldera. Como pocas veces se volvió a ver. Un partido parejo, con los cordobeses manejando el juego hasta los últimos diez minutos. Fue cuando Pacífico encontró el gol y en apenas tres minutos borró a su rival, para estampar un meritorio 95 a 86. Basado en el trío Richotti-Downey-Hilton y otra vez con reparto del goleo: Richotti 17, Rodríguez 17, Hilton 19, Downey 20, De Battista 15, más el aporte de Iturrioz y Ferrini. La visita con Marcelo Milanesio, Germán Filloy y Cerutti, dirigidos por Walter Garrone.

Aquella Liga, la tercera en su historial, fue ganada por Atenas, escoltado y por Ferro, los dos vencidos de Pacífico. Bahía Blanca era entonces protagonista del torneo, al punto que el tercer puesto fue de Pacífico, el cuarto de Olimpo y el quinto de Estudiantes.