El registro de un vehículo permitió sospechar que el narcotraficante estuvo detrás del ingreso ilegal de dinero al país.
Tres policías de Bolivia fueron detenidos luego de que se descubriera que en un control vehicular incautaron un bolso con USD 1 millón y dejaron ir a los ocupantes, que siguen desaparecidos. La justicia de Bolivia inició una investigación tras el arresto de los funcionarios y recuperaron buena parte del dinero robado. Las autoridades, además, sospechan que detrás de este caso está el narcotraficante uruguayo Sebastián Marset, quien se fugó de Santa Cruz a fines de junio.
El dinero había ingresado a Chile de manera ilegal el 10 de enero, según declaró el viceministro de Régimen Interior y Policía de Bolivia, Jhonny Aguilera. “Tiene que haber existido un ocultamiento de ese dinero o se ha utilizado alguna aeronave que impidiera que ese dinero fuera declarado y descubierto”, explicó, según consignó El Observador.
El ministro Eduardo del Castillo, en tanto, aseguró que esa plata iba a ser invertida en el narcotráfico de una zona del trópico de Cochabamba.
El avance de la investigación permitió encontrar un dato clave que es el que permite vincular el caso al narcotraficante Marset. El auto del que los policías robaron el dinero está a nombre de un hombre que también registró un vehículo encontrado en la fuga del narcotraficante uruguayo de Santa Cruz de la Sierra.
“Ha habido una personas que se ha encargado de la gestión, vamos llamar tramitología, vinculada al registro de dos vehículos. Uno es un BMW que fue encontrado por la Policía Boliviana después de que Marset huyó. Esa misma persona hace los registros del vehículo que hoy está siendo buscado”, aseguró.
A fines de junio se descubrió que Marset vivía en Santa Cruz de la Sierra escondido en su faceta de jugador de fútbol. Vivía en una lujosa casa, pero logró escapar de la policía y su paradero es aún desconocido.
Ha tenido apariciones públicas desde paraderos desconocidos a través de videos que hace llegar a los medios o, incluso, en una entrevista televisiva que dio a la televisión uruguaya. En ese reportaje con el programa Santo y seña, el narcotraficante contó que alguien le informó que lo estaban por atrapar. “Me avisaron, sí, me avisaron. Armé dos valijas con ropa mía, de los niños, y me fui”, comentó.
Por el caso de los policías, la Justicia de Bolivia envió a prisión preventiva a Óscar Hebert Gutiérrez, a quien investiga como presunto testaferro de Marset por reclamar el dinero robado a las autoridades después del hurto. Le imputaron delitos de contrabando y legitimación de ganancias ilícitas.
Además, las autoridades continúan investigando el vínculo entre el dinero que apareció y la organización de Marset, mientras también busca el vehículo y a las dos personas que lo ocupaban cuando robaron el dinero.
Además, también debió declarar como testigo Sharon V, una modelo que ganó el certamen de belleza Miss Supranational Bolivia 2015. La modelo fue vista varias veces cargando combustible en el vehículo.
Marset ha cuestionado el accionar de la Justicia boliviana y de las autoridades de gobierno. En la entrevista televisiva desmintió, por ejemplo, la versión que indicaba que había secuestrado a un policía para fugarse. Criticó al ministro de Gobierno de Bolivia, Eduardo del Castillo, quien, según él, “el 90% de lo que dice es mentira”.
Marset definió a ese funcionario como un “corrupto” y aseguró que en Bolivia hay más corrupción que en Paraguay. “No confío en nada en ellos”, aseguró.
En sus declaraciones, Marset elogió el sistema judicial de Uruguay y lo definió como el país “menos corrupto” de Sudamérica. Sus comentarios fueron parte de una estrategia para negociar la entrega de su hermano, su pareja y su cuñado en su país y evitar la extradición a Paraguay.
infobae.com
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