Exigua multa por incumplir uso del aire en los colectivos “diferenciales”

El Viceministerio de Transporte (VMT), cuyo titular es Guido Benza, anunció controles aleatorios del funcionamiento del aire acondicionado en los buses de servicio diferencial, cuyo precio del pasaje es G. 3.400. Las declaraciones las brindó en coincidencia con el pronóstico de ola de calor en este fin de semana.

Benza precisó que los buses deben tener la temperatura de 20°, y en caso de que no sea así, se tipifica como una “falta leve”, según lo explicado, y la sanción es una multa de G. 294.000.

Peña habla de licitar itinerarios de transporte público

En cuanto al sistema de verificación, explicó que un equipo de fiscalizadores sale a las calles a controlar el estado de los buses, en tiempo real.

Las empresas de transporte que sean descubiertas en infracción, deberán pagar las multas para tener derecho al cobro del subsidio, conforme se estipula en el Decreto N° 710, artículo 9, inciso h, firmado por el presidente Santiago Peña el 15 denoviembre último. Sin embargo, el historial del sector muestra escasas multas y que aún en infracción, las empresas reciben subsidio.

Multa Vs. Subsidio

El gobierno de Santiago Peña destina un promedio de G. 25.000 millones al mes en concepto de subsidio al pasaje por el servicio del transporte público del Área Metropolitana de Asunción, con dinero de los contribuyentes de todo el país.

Las beneficiarias son un poco más de 30 concesionarias, las cuales cobran diferentes montos, pues varían de acuerdo al itinerario que cumplen, cantidad de buses y por ende, la cantidad de pasajeros que trasladan. Las firmas que tienen mayor capacidad, en teoría, son las que más cobran.

Tarifa Técnica, la fórmula que debe sincerar y mejorar el servicio de transporte público

El subsidio se calcula con una fórmula de Tarifa Técnica, la cual estima una prestación óptima, razón por la que el servicio es caro, pero eso está muy lejos de la realidad que padecen los pasajeros.

Los usuarios soportan largas esperas en la paradas, sin refugio del sol ni las lluvias y luego viajan hacinados en los buses, incluso sin refrigeración, pese a que pagan por ese componente del servicio.