Unos supuestos encuentros en París, que salpican al hijo del canciller Álvaro Leyva, ensombrecen el caso que explotó por la cancelación de un millonario contrato.
La salida del su cargo de la directora de la oficina de Defensa Jurídica del Estado, Martha Lucía Zamora, no ha apaciguado la polémica en Colombia por las supuestas irregularidades en la licitación de pasaportes. De hecho, hay nuevos elementos: una misteriosa reunión en París, que ha salpicado al canciller Álvaro Leyva.
La destitución de Zamora fue anunciada desde Dubái (Emiratos Árabes Unidos) por el presidente colombiano, Gustavo Petro, quien aseguró que tenía “distancia” sobre la forma en “cómo se ha llevado la defensa de la nación en varios temas” y que por eso tomaba esa determinación.
El mandatario desestimó que la renuncia solicitada a Zamora tuviera relación con diferencias entre el canciller y la exfuncionaria por el manejo de la demanda interpuesta por la compañía canadiense Thomas Greg & Sons, que alega presunto incumplimiento del Estado colombiano en un contrato para emitir pasaportes.
Zamora confirmó la información en sus redes y explicó que, aunque le pidieron la renuncia el viernes 1 de diciembre, esperó hasta el lunes de esta semana para hacerla efectiva porque quería consultar la decisión con su familia.
Ahora bien, entre las revelaciones más recientes que complejizan el caso se encuentran una supuesta cita en París en la que habría participado el hijo del titular de Relaciones Exteriores, Jorge Leyva, y el director de Asuntos Jurídicos Internacionales de ese despacho, Juan Carlos Losada Perdomo.
En una entrevista para el programa del periodista Daniel Coronell, en la W Radio, Zamora aseguró que en un hotel parisino se estaban realizando encuentros sobre los que iba a alertar a la Fiscalía. A pesar del peso de esa aseveración, dijo que la información no había podido ser corroborada por ella.
¿De qué se tratan las supuestas reuniones?
La controversia sobre los pasaportes vuelve a estar sobre la mesa, meses después de la suspensión de la licitación a Thomas Greg & Sons. Zamora sostiene que durante las reuniones en la capital francesa se habría pactado una negociación privada y paralela entre los interesados en participar en una licitación, sobre los que no reveló mayores datos.
La exfuncionaria dijo que no podía hablar del contenido de la reunión y que esperaba que se desarrollaran las investigaciones “para saber si en esta nueva licitación también hay temas que deben ser conocidos por las autoridades judiciales”.
Lo que dijo el hijo del canciller
En una entrevista con Semana, Jorge Leyva admitió que sí tuvo encuentros en París con funcionarios de Relaciones Exteriores que estaban de paso en Europa, entre ellos, su padre.
Aclaró que más que reuniones cerradas fueron idas a cafés y restaurantes, donde habría fungido de “guía turístico” de los visitantes, entre los que se encontraba Losada, su amigo personal.
El hijo del canciller aseguró que nunca ha tenido ningún tipo de injerencia sobre las licitaciones de pasaportes, pero que era un tema del que “habla todo el mundo”. Del mismo modo, negó conocer a Zamora, aunque valoró que la exfuncionaria “está respirando por la herida”.
En los medios trascendió una supuesta discusión, que incluyó gritos, entre el titular de Relaciones Exteriores y la exfuncionaria. Según la información publicada por Coronell, Leyva le habría pedido a Zamora que defendiera la posición del presidente sobre la licitaciones a pesar de las pérdidas que esto causaría al Estado, debido a la demanda millonaria de la empresa canadiense.
Sin embargo, nuevamente el mandatario tomó partido por su canciller y desmintió en las redes que eso hubiera ocurrido.
¿Qué pasa con las licitaciones?
El pasado 24 de octubre, Thomas Greg & Sons radicó ante la Procuraduría General de Colombia una solicitud de conciliación extrajudicial en la que exigía la adjudicación de un contrato para emitir pasaportes, o que el Ministerio de Relaciones Exteriores la compensara con 117.000 millones de pesos –poco menos de 29,4 millones de dólares– por ganancias no percibidas y daño reputacional, recoge Caracol.
Durante 17 años, la multinacional británica tuvo contrato de exclusividad con la Cancillería colombiana para expedir los pasaportes del país. Sin embargo, el último acuerdo culminó el 2 de octubre de 2023 y aunque se esperaba una renovación automática, no sucedió en medio de dudas del presidente sobre si habría otros oferentes.
En septiembre pasado, Leyva declaró desierto el proceso licitatorio y negó un recurso de reposición que pretendía dar continuidad al contrato, que ya había sido prorrogado automáticamente el año anterior.
En vísperas del vencimiento del último acuerdo, su despacho publicó un boletín de prensa en el que se declaraba “el estado de urgencia manifiesta”, para no afectar la emisión del documento.
Esto le valió a Leyva una investigación disciplinaria, adelantada por la Procuraduría, por presuntas irregularidades en la suspensión de un proceso de licitación de pasaportes.
actualidad.rt.com
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