En el debate presidencial previo al balotaje entre Sergio Massa y Javier Milei, el eje principal se centró en los cruces y cuestionamientos hacia las propuestas del otro candidato. En este segmento, cada aspirante tuvo seis minutos para exponer sus ideas o criticar las del contrincante. Durante este tiempo, se discutieron iniciativas ya conocidas, como el aumento de las exportaciones para combatir la inflación, propuesto por Massa, y la dolarización con la eliminación del Banco Central, planteada por Milei. El debate se desarrolló como un examen, con Massa, el candidato oficialista, siendo el principal objeto de análisis.
En su minuto de presentación, Sergio Massa propuso un «gran cambio para Argentina» basado en un «gran acuerdo con políticas de estado, diálogo, consenso y respeto a los que piensan distinto». Esta visión apunta a establecer un terreno de entendimiento y colaboración, buscando superar las divisiones políticas existentes.
Javier Milei, en cambio, se presentó como un economista experto en el crecimiento económico «con y sin dinero». Destacó su capacidad para impulsar la economía, crear empleos bien remunerados y erradicar la pobreza e indigencia. Con determinación, afirmó conocer la fórmula para eliminar el cáncer de la inflación que afecta al país.
El bloque económico del debate siguió una dinámica en la cual Milei fue el primero en hablar debido al formato establecido. Massa aprovechó esta situación para lanzar una serie de cuestionamientos a las ideas del candidato libertario. A medida que avanzaba el debate y Milei utilizaba la mayor parte de su tiempo, Massa presentó sus propias propuestas.
Massa le preguntó qué haría con los subsidios. “Ustedes mintieron con los subsidios, sos un mentiroso. No vamos a tocar las tarifas, vamos a esperar a que la economía se recupere y que se puedan pagar. Voy a terminar con el Banco Central, es la maquinita, la forma en la que ustedes nos roban a nosotros. Cuando se recupere la economía vamos a tocar tarifas”, dijo. El oficialista insistió en distintas ocasiones sobre este punto.
Milei planteó una perspectiva crítica de la economía argentina, sosteniendo que tiene «100 años de decadencia». Hizo hincapié en la pérdida de posición del país, que pasó de ser el más rico del mundo en el siglo XX a ocupar el puesto 130° a tipo de cambio paralelo en la actualidad. Advirtió sobre el riesgo de hiperinflación y señaló al Banco Central como generador de inflación a través de la impresión de billetes. Para Milei, el camino hacia otra hiperinflación está trazado, y criticó la política de ajuste, que según él, siempre se realiza mediante el aumento de impuestos en lugar de la reducción del gasto, lo cual considera inviable para el Estado.
“La construcción de politicas de Estado, agraviando no lo vas a construir. Lo escuchamos hablar de motosierra que significa una suba de 300% de las tarifas. ¿A cuál le creemos? O mintió toda la campaña o miente esta noche”, dijo Massa.
“La salida de Argentina no es apropiarse el ahorro de la gente en nombre de la dolarización, sino con aumento de exportaciones, con la construcción de trabajo sobre la base de mejores ingresos, con un acuerdo de unidad nacional que nos permita la reducción de impuestos y retenciones. Un camino de simplificación tributaria. No sobre la base de un recorte de 80 mil pesos por mes para los jubilados o la vuelta de las AFJP”, continuó.
Turbulento careo presidencial: el segundo debate estalla en acusaciones personales sin propuestas claras
El reciente enfrentamiento en el segundo debate presidencial dejó una estela de intensos cruces y acusaciones personales, aunque se destacaron por su ausencia propuestas concretas. En esta análisis, exploraremos los puntos clave abordados por los candidatos presidenciales durante este evento, centrándonos en áreas cruciales como Economía, Salud, Educación, Relaciones Exteriores, Trabajo, y Derechos Humanos.
En el primer bloque, los aspirantes a la presidencia compartieron sus perspectivas sobre temas fundamentales que impactan la vida de los ciudadanos argentinos. Sin embargo, las propuestas concretas fueron escasas, dando lugar a un intercambio de opiniones más enfocado en desacuerdos que en soluciones prácticas.
Sergio Massa, al intervenir, destacó la importancia de la convivencia democrática a 40 años del retorno de la democracia en Argentina. Además, resaltó el reconocimiento internacional que el país ha ganado a través de la defensa de la memoria, verdad y justicia. Massa propuso llevar la discusión más allá y abordar nuevos derechos humanos, como el derecho a un ambiente sano y a la tierra para el desarrollo personal. En este contexto, abogó por un cambio de paradigma en los delitos ambientales, proponiendo penas de prisión efectivas para aquellos que contaminen ríos, talen bosques o destruyan humedales. Asimismo, presentó un programa para poner en uso los inmuebles ociosos del Estado, ofreciendo dos millones de lotes con servicios para quienes busquen construir su hogar.
Por otro lado, Javier Milei respondió de manera contundente, destacando lo que considera contradicciones en las posturas de Massa. Señaló con ironía la referencia de Massa a la convivencia democrática, recordando episodios en los que el espacio político de Massa protagonizó paros y situaciones que socavaron la estabilidad democrática. Milei acusó al sector de Massa de convertir la democracia en una «democracia fallida», enfatizando su percepción de que, en lugar de respetar las minorías, buscan imponer su voluntad de manera tiránica.
Milei también abordó cuestiones relacionadas con la justicia y la libertad de expresión. Hizo referencia a un intento de censura por parte de un candidato del espacio de Massa, subrayando su opinión de que hay una tendencia preocupante hacia la interferencia en la libertad de expresión.
Fuente de esta noticia Diario LARED21 Digital Uruguay.
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