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Jue. Nov 21st, 2024
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En Playas y Posorja hay quejas por los elevados costos y la falta de agua potable – Las deudas de los usuarios superan el millón de dólares.
 
Interrupciones del servicio de agua potable, falta de presión, líquido con sabor a tierra, incrementos de tarifas y la falta de materiales para nuevas instalaciones. Son algunos de los problemas que enfrenta la empresa Hidroplayas EP, encargada del servicio de agua potable y alcantarillado en General Villamil (Playas), Posorja, El Morro, Engabao y comunas aledañas.
 
En Playas, los reclamos por el irregular servicio se concentran en los barrios altos, como Balcón del Pacífico. La situación se complica en todo el cantón por las reparaciones o el corte de energía eléctrica.
 
“Son dos servicios básicos que tienen falencias y las soluciones son solo promesas”, manifestó el playense Julio Enríquez, quien mostró planillas que sufrieron un incremento de 12 a 120 dólares.
 
No es el único caso. Tania López dijo que hace un mes solicitó un medidor, que solo logró instalar comprando los materiales, ante las limitaciones de Hidroplayas.
 
En Posorja, parroquia de Guayaquil, las quejas son mayores. “El viernes pasado no hubo agua y regresó al día siguiente”, denunció la usuaria Laura Solórzano, quien tiene un convenio con la empresa para ponerse al día en los cobros.
 
“El agua llega después de la medianoche y turbia”, enfatizó Silvio Reyes, del barrio La Fortuna.
 
Reyes cree que las limitaciones del servicio en la parroquia se deben porque la mayor parte del líquido lo consumen las industrias pesqueras, sin que reaccione Hidroplayas.
 
Los parroquianos interpusieron ante la Defensoría del Pueblo una demanda por el mal servicio y están en espera de una solución.
 
“De lunes a viernes casi no hay agua, además llegan elevados los valores en las planillas”, se quejó el dirigente Hipólito Crespín.
 
El plan maestro de rehabilitación de la red del sistema de agua potable sería la solución definitiva. Consiste en el cambio de las redes de cemento asbesto y que tienen más de 60 años de antigüedad.
 
Aquel es uno de los motivos por el mal sabor del agua o se suspende el servicio sin previo aviso.
 
Hidroplayas busca el financiamiento y planifica el uso de recursos para la inversión de 2’500.000 dólares en la primera etapa del proyecto. Los estudios ya se realizan en espera que los trabajos arranquen en marzo del próximo año.
 
Cabrera reconoce el desabastecimiento en el suministro de agua en Posorja, especialmente en los últimos tres meses por casos fortuitos, como roturas de tuberías que han demorado su reparación.
 
No había materiales para las reparaciones. Aquello se debió porque antes no se realizaron las inversiones necesarias en la infraestructura que garantice el servicio permanente. Tal era la difícil situación que los anteriores administradores de Hidroplayas solicitaban a los usuarios que compren los medidores.
 
‘Herencia recibida’. Desde el pasado 26 de junio, Fernando Cabrera está a cargo de la gerencia de Hidroplayas. Afirmó que encontró colapsado el sistema de agua potable y alcantarillado. Calcula que no se realizaron mantenimientos en los últimos tres años y dejaron a un lado los procesos de potabilización.
 
A las irregularidades suma una deuda que supera el millón de dólares, lo que dificultaba la adquisición de materiales desde el 2012.
 
Añade que debió enfrentar demandas por liquidación de extrabajadores por 60.000 dólares y una deuda de 560.000 dólares con la Corporación Nacional de Energía Eléctrica (CNEL), con la que se acordó pagar en cuatro años cuotas de 11.000 mensuales. A ello suma una cartera vencida de un millón de dólares por mora de los usuarios.
 
Para enfrentar estas falencias, Cabrera busca fortalecer los controles financieros, de suministro, potabilización y calidad del agua.
 
En enero pasado, Hidroplayas incrementó la tarifa en espera de mejorar el servicio. No hubo resultados positivos, al contrario generó malestar en los usuarios por considerar cobros exagerados. Mediante evaluaciones, la empresa verificará si los valores que se registran se ajustan al pliego tarifario.
 
A cuentagotas
 
Traspaso
 
En dos años Guayaquil podría pasar a subadministrar el agua a Posorja. Actualmente se estudia el proyecto. El 60 % de la facturación del agua corresponde a Posorja.
 
Finanzas
 
Mensualmente Posorja recauda 325.000 dólares por concepto de tarifas de agua potable; anteriormente sus ingresos estaban por alrededor de los $ 255.000.
 
En peligro
 
La estación de bombeo de San Juan que lleva el agua a la planta potabilizadora en San Antonio está en riesgo; tiene dos bombas y sus equipos están descontinuados.
 
Fuente El Expreso 

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