Cudy y Danny, dos británicos de 15 años, quisieron probar que los rumores sobre la supuesta falla en el smartphone eran verdaderos, pero se excedieron
Lejos de agotarse, la polémica por la endeblez del nuevo iPhone 6 Plus no para de crecer. Desesperados por defender a la marca de sus amores o por probar que tras la muerte de Steve Jobs se convirtió en un gran fiasco, los fanáticos de la tecnología hacen cosas cada vez más alocadas.
En esta oportunidad, los protagonistas fueron dos adolescentes que buscaron despejar toda duda sobre el hecho de que el teléfono inteligente se dobla al ejercer presión. Para ello, se filmaron haciendo el experimento en un Apple Store, con un iPhone 6 Plus que estaba en exhibición.
El video comienza con Cudy, el líder, presentándose a sí mismo y a su compañero, Danny. En la introducción, grabada luego de haber ido a la tienda, contó lo que hicieron.
El joven manifestó que, al preguntarle a uno de los vendedores si era verdad que el teléfono se doblaba, éste le había dicho que no, que se trataba de un “rumor de internet”. Sin embargo, como él y su amigo demostraron, efectivamente se dobla… y se rompe.
“La pantalla saltó para afuera y tuvimos que empujarla nuevamente hacia adentro, porque había un montón de gente. Pero pueden ver que sí se dobló”, dijo.
“No es un rumor, es verdad. Espero que lo disfruten. Y Apple, realmente tienes que solucionar esto”, desafió el joven.
Luego pasó a mostrar las imágenes tomadas dentro del comercio. En un primer momento, parecía que las versiones eran mentira, ya que, a pesar de sus esfuerzos, Cudy (el de la prenda negra) no podía doblar el iPhone.
Sin embargo, cuando Danny (el de rojo) lo tomó y lo apretó con todas sus fuerzas, no sólo se dobló, sino que la pantalla comenzó a salirse.
“¡Demonios! Es hora de irse”, dijo entre risas el joven. Pero el otro quería una prueba más.
Tras algunos nuevos intentos fallidos de Cudy, Danny volvió a intentarlo y lo dobló aún más. “¡Oh mi Dios, cálmate, cálmate!”, comenzó a exclamar el líder, temeroso de que los descubrieran.
Al final, se pudo ver el diálogo entre los jóvenes y el empleado, que negó las fallas en el equipo.
Más allá de probar su punto, los adolescentes fueron severamente criticados. No sólo porque rompieron un objeto por el que no habían pagado, sino porque, según muchos comentaristas, cualquier teléfono se puede romper si se aplica tanta fuerza.
En un video publicado posteriormente, Cuddy pide perdón, reconoce haber sido un “idiota” y promete pagar por el teléfono dañado.
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