
Imagen RTVC
RTVC, Sistema de Medios Públicos de Colombia, volvió a ocupar el centro del debate público tras la publicación de una columna en el diario La República, firmada por el periodista Santiago Ángel, que atribuía a integrantes de la entidad expresiones y comportamientos de carácter delictivo. El texto, titulado “Revuélquele toda la vida a ese malparido”, provocó una respuesta firme del equipo responsable del servicio informativo de Señal Colombia y Radio Nacional, que denunció la ausencia de rigor en las afirmaciones y la construcción de un relato basado en rumores y suposiciones.
Para el equipo periodístico de RTVC, la columna no solo faltó a la verdad, sino que se enmarca en una línea sostenida de ataques y señalamientos que, lejos de contribuir al debate público, degradan el ambiente profesional y ponen en riesgo a quienes trabajan dentro del sistema de medios del Estado. “Nunca hemos recibido ni impartido una orientación como la que insinúa el columnista”, afirmaron, rechazando categóricamente las atribuciones sobre persecuciones, interceptaciones o directrices de carácter criminal.
El pronunciamiento ocurre en un momento especialmente sensible para el periodismo colombiano. En las últimas semanas, el país ha visto un aumento de amenazas contra reporteros, agresiones directas, vulneraciones al sigilo profesional y campañas de desprestigio amplificadas por plataformas digitales. Ese clima, advierten desde RTVC, no solo deteriora la libertad de prensa, sino que afecta la salud mental y la seguridad de las y los periodistas que cumplen funciones públicas.
La entidad recordó también que este episodio se suma a un antecedente aún no aclarado: la publicación, meses atrás, de audios supuestamente atribuibles a miembros del Gobierno y difundidos por el diario El Tiempo, que posteriormente se reveló que habían sido generados mediante inteligencia artificial. Pese a ello, el medio no ha rectificado públicamente la información. Para RTVC, este tipo de episodios erosiona la confianza en la prensa y expone la vulnerabilidad del ecosistema informativo ante tecnologías que pueden ser manipuladas sin controles editoriales suficientes.
1️⃣ La columna publicada recientemente por el diario La República sobre RTVC, titulada “Revuélquele toda la vida a ese malparido”, firmada por Santiago Ángel, carece del mínimo rigor periodístico, está construida con testimonios de oídas, afirmaciones falsas, faltando a la verdad…
— RTVC Colombia (@RTVCco) November 20, 2025
En este contexto preelectoral, donde los discursos se polarizan y la presión sobre los medios se intensifica, la institución advierte que parte de las controversias recientes no puede entenderse sin observar la estructura de propiedad de los grandes conglomerados de comunicación en Colombia. La concentración de medios en manos de grupos empresariales vinculados a sectores como la energía, la salud o las importaciones estratégicas -ámbitos impactados por reformas actualmente en discusión- abre una discusión legítima sobre la independencia editorial y los posibles conflictos de interés. RTVC sostiene que la función de los medios públicos es precisamente ofrecer una alternativa informativa que no responda a intereses económicos privados ni a presiones coyunturales.
Repudiamos la ligereza con la que @CaracolRadio, dirigida por Gustavo Gómez (@gusgomez1701), intenta convertir en noticia criminal una columna especulativa y perversa de Santiago Ángel, sostenida en un fragmento de conversación anónima, ostensiblemente manipulado e interpretado… pic.twitter.com/TduNjRUZc4
— RTVC Colombia (@RTVCco) December 3, 2025
El equipo informativo insistió en que las decisiones editoriales de Señal Colombia y Radio Nacional se toman en consejos de redacción, bajo estándares profesionales y códigos de ética ampliamente aceptados en el periodismo internacional. Afirmaron que no existe, ni ha existido, instrucción alguna orientada a perseguir a ciudadanos, figuras públicas o periodistas, y recordaron que varios de los profesionales que integran RTVC han sido históricamente víctimas de hostigamientos, lo que hace aún más delicadas las insinuaciones publicadas por el columnista.
La entidad invitó a quienes tengan denuncias o inquietudes a presentarlas ante las autoridades judiciales o administrativas competentes. Al mismo tiempo, dejó claro que tomará acciones frente a cualquier afirmación que ponga en riesgo su operación, la seguridad de su personal o su credibilidad ante las audiencias, que, según señalan- han respaldado de manera creciente el trabajo informativo de los medios públicos.
En un país donde la confianza en las instituciones informativas atraviesa uno de sus momentos más frágiles, RTVC reivindica su papel como servicio público, ajeno a intereses privados y comprometido con la garantía de información verificada, plural y responsable. En un escenario marcado por tensiones políticas, campañas de desinformación y tecnologías capaces de alterar la realidad con facilidad, la defensa de la integridad periodística se vuelve no solo un acto profesional, sino un componente esencial para la salud democrática del país.
carloscastaneda@prensamercosur.org
